Occidente endurece el trato a los refugiados

Los Gobiernos de los países industrializados, agobiados por los "millones de personas que huyen de persecuciones" e impulsados por una opinión pública de corte más nacionalista, han adoptado una política más restrictiva con respecto a los refugiados, a los que han rechazado masivamente, sin preocuparse de buscar soluciones a los problemas que originaron el abandono de sus países, indica el informe anual de Amnistía Internacional (AI) referente a las violaciones de los derechos humanos ocurridas en 129 países durante 1986.

Amnistía Internacional destaca que, si bien la mayoría de los Gobiernos acepta que no debe devolverse por la fuerza a las personas que corren peligro de ser ejecutadas o de sufrir torturas o encarcelamiento, cada vez es mayor la disposición a considerar que los temores de quienes buscan asilo político son "exagerados" y "sin fundamentación manifiesta".E informe denuncia que la preocupación mundial ante el crciente flujo de los refugiados, epecialmente a partir de mediados de la década de los setenta, se utiliza frecuentemente para "justificar la imposición de nuevas restricciones para conceder asilo", y añade que aunque la millón de Al no es ocuparse de los refugidos, la organización está obligida a velar por que se conceda el asilo a quienes abandonan su familia y su medio y cruzan la frontera para evitar "el encarcelamiento, la tortura y la muerte a manos del Estado".

La sentencia contra el Movimiento Santuario de Estados Unidos por tratar de proporcionar asilo a refugiados de El Salvador y Guatemala, o soviéticos devueltos por Finlandia a la URSS, y yemeníes devueltos por la URSS a Yemen del Sur que a finales de 1986 continuaban en la cárcel, son algunos de los ejemplos citados en el informe.

La emigración por asuntos políticos afecta a los cuatro continentes. En Europa, Al cita a ciudadanos polacos, rumanos, españoles, turcos y soviéticos. En América, los que huyen de las violaciones a los derechos humanos que cometen sus Gobiernos son de El Salvador, Guatemala, Chile, Colombia, Haití y Cuba. En Asia, se han sumado a los millones de afganos, camboyanos, laosianos, vietnamitas y birmanos miembros de la minoría tamil de Sri Lanka y ciertas tribus de Bangladesh. En África, ciudadanos de Suráfrica, Angola, Zaire, Etiopía, Chad, Uganda, Guinea Ecuatorial y Zimbabue huyen continuamente de sus países.

Continúan las violaciones

Aministía Internacional indica que las víctimas de las violaciones de los derechos humanos ascienden a millones de hombres, mujeres y niños. La situación en América Latina denuncia la existencia de una campaña de secuestros e intimidación realizada por "fuerzas clandestinas a las que se cree vinculadas a los servicios de seguridad" del Estado de Chile; más de mil personas ejecutadas "sumariamente" en Colombia; 'torturas generalizadas" en El Salvador y desapariciones en Perú. Asimismo, se inquieta porque las leyes de punto y final de Argentina y Uruguay impidan nuevas investigaciones sobre la suerte de los desaparecidos en los regímenes pasados.Carmen Soto, presidenta de la sección española de AI, dijo que la organización se felicitó de la nueva política de derechos humanos del líder soviético, Mijail Gorbachov, pero indicó que, a pesar de las liberaciones habidas el año pasado, aún continúan en las cárceles soviéticas 530 presos de conciencia.

Suráfrica y Corea del Sur son los países de África y de Asia más criticados, y se aplaude los esfuerzos de Filipinas y una leve mejora generalizada en África. AI destaca también que China ha firmado la Convención de las ONU contra la Tortura.

Más información en la página 16