Prioridad absoluta para la sanidad en los presupuestos de la Seguridad Social y aumento del 8% en el gasto de pensiones

Los presupuestos del conjunto de la Seguridad Social para 1988, que serán presentados a partir de hoy a patronal y sindicatos en los consejos generales de los respectivos institutos, reflejan una prioridad absoluta para los gastos en sanidad, cuyas dotaciones aumentarán más del doble que las destinadas a pensiones. Tanto los ingresos como los gastos ascenderán a 4,85 billones de pesetas, cifra superior en un 11 % a la aprobada par las Cortes para 1987. Aunque la revalorización media de las pensiones quedará en el 4%, la masa total de prestaciones económicas crecerá el 8%.

La anunciada prioridad se observa tanto en los cuadros de financiación como en los de gastos. Así, mientras que la aportación del Presupuesto del Estado al de la Seguridad Social crecerá en 140.000 millones de pesetas (un 12,7%, hasta totalizar los 1,22 billones), los gastos sanitarios aumentarán en 200.000 millones de pesetas, hasta los 1,41 billones de pesetas.

Como en años anteriores, el Gobierno se reservará hasta diciembre próximo la decisión de redistribuir el 4% de revalorización media fijada para las pensiones, así como de precisar las bases y los tipos de cotización de empresas y trabajadores. Quedará margen para elevar las pensiones mínimas algo más que el citado promedio, con el fin de cumplir el plan de acción 1987-1990 que se ha trazado el Ministerio de Trabajo, uno de cuyos principales objetivos consiste en aproximar tales pensiones al salario mínimo interprofesional. Pero los datos no contemplan rebaja alguna en las cotizaciones de las empresas.

Reparto de ingresos y gastos

En efecto, junto a la aportación del Estado, los 4,85 billones de ingresos se nutrirán de cotizaciones por un total de 3,38 billones y de otros ingresos por 0,25 billones. El aumento previsto en la recaudación por cotizaciones se aproxima al 9,5%, si bien entre tres y cuatro puntos se atribuyen al incremento del número de cotizantes.

Por el lado de los gastos, las prestaciones económicas sumarán 3,27 billones de pesetas, un 8%. más que en 1987. La asistencia sanitaria absorberá 1,41 billones de pesetas, con aumento del 16%, si bien su presupuesto se engrosará algo desde las entidades gestoras privadas (las mutuas patronales). Los servicios sociales dispondrán de 0,08 billones, también con un aumento cercano al 16%.

Las asignaciones por centros gestores reafirman la prioridad de la sanidad. El Instituto Nacional de la Seguridad Social, que asume la gran mayoría de las pensiones y cuyo presupuesto de prestaciones económicas aparece en el cuadro adjunto, recibirá 3.168.000 millones de pesetas, un 8,5% más que en 1987.

El Instituto Nacional de la Salud (Insalud) dispondrá de 1.351.000 millones de pesetas, con el 17% de aumento. El presupuesto del Instituto Nacional de Servicios Sociales (Inserso) también aumentará el 17%, hasta 81.000 millones. Por último, el ISM dispondrá de 84.000 millones (un 8,7% más) y la Tesorería de 6-51.000 millones (cerca del 5% de aumento).

Del incremento de 200.000 millones para el Insalud, 185.000 millones irán a gastos hospitalarios.