Abel Caballero anuncia el estudio de un satélite de comunicaciones
ENVIADO ESPECIAL El Gobierno va a comenzar estudios sobre la posibilidad de construir un satélite español que sería utilizado para los más modernos servicios de telecomunicación, incluidos los de transmisión de señales de televisión, según anunció ayer el ministro de Transportes, Turismo y Telecomunicaciones, Abel Caballero, en el seminario sobre las Tecnologías de la información como motor de futuro que se celebra en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.
Esta postura supone un cambio radical de actitud del Gobierno en el tema del satélite propio, puesto que desde el primer mandato socialista fue desechado este planteamiento, debido básicamente a razones económicas, tras un informe negativo redactado por la entonces Comisión Nacional de Telecomunicaciones.
"Desde anteriores estudios han cambiado mucho las cosas", dijo Abel Caballero. "Ahora hay nuevas posibilides técnicas y nuevas demandas de servicios, y queremos saber con certeza si las condiciones que entonces aconsejaron no construirlo ahora aconsejan lo contrario".
Abel Caballero se refirió también, entre los proyectos de su departamento para los próximos años, a la elaboración de un plan técnico nacional de la televisión privada, que estará terminado, según sus propias declaraciones, antes de final de este año. Dicho plan contempla tres aspectos: la red de difusión y distribución de señales, sobre cuya configuración el ministro no quiso dar explicaciones; el transporte de programas, y, por último, los costes. Añadió Abel Caballero que los tres canales que permite el proyecto de ley, que actualmente se encuentra en comisión en el Parlamento, deberán tener la misma cobertura y estar situados en la banda de UHF.
Previamente, en el mismo seminario que dirige Antonio López, el ex director de TVE y actual presidente ejecutivo de Amper, intervino la directora general del Ente Público RTVE, Pilar Miró, quien dijo que la televisión pública necesita financiarse desde ahora mismo con una subvención estatal para hacer frente a las televisiones privadas. Pilar Miró se manifestó "no en contra de la televisión privada. Debe haber televisión privada cuanto antes mejor", y añadió que la televisión pública no debe tener miedo a la televisión privada, a pesar de que le arrebatará parte del mercado publicitario porque, "entre otras cosas, la nueva situación hará posible un saneamiento de la televisión pública".
Discrepó la directora general de RTVE de algunos puntos del actual proyecto de ley de televisión privada, "especialmente en lo que afecta a la televisión pública, y sobre todo en las referencias a la red, que está trazada de una forma muy ambigua".
En su conferencia, que tituló Implicaciones económicas en la nueva televisión, Pilar Miró planteó la nueva estrategia financiera de televisión, teniendo como punto central las subvenciones. "La subvención estatal debería existir tanto con televisión privada como sin ella, ya que el servicio público que debe cumplir RTVE no está condicionado por la aparición de las televisiones privadas".
RTVE se enfrenta a la nueva situación, desde el punto de vista técnico, con una cobertura de la red de difusión que alcanza al 95% en la primera cadena y al 89% en la segunda en todo el territorio nacional. Ello requiere el empleo de más de 1.400 personas repartidas en .1.000 centros, lo que supone unos gastos de 8.500 millones de pesetas anuales.
Pilar Miró, que se pronunció a favor de que las nuevas televisiones en España utilicen una sola red y que ésta sea la actual existente de televisión antes que la de Telefónica, dijo que para mejorar esta red será necesario realizar una inversión de 50.000 millones de pesetas.
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