Mil expertos participan en el II Congreso Mundial Vasco

El II Congreso Mundial Vasco, promovido por el Gobierno que preside el lehendakari José Antonio Ardanza y por las instituciones académicas y culturales vascas, pretende intercambiar, a partir del próximo 31 de agosto, experiencias científicas y culturales encaminadas a suscitar la investigación propia. Casi un millar de científicos y expertos profesionales participarán, durante tres meses, en este encuentro, que se celebrará en las tres capitales vascas. Con esta iniciativa, sus promotores quieren demostrar, entre otras cosas, que Euskadi, además de con personas violentas, cuenta con excelentes investigadores.

Treinta años después de que el presidente del Gobierno vasco en el exilio José Antonio Aguirre consiguiera reunir en París una nutrida representación de la diáspora vasca, el Ejecutivo autónomo ha organizado el segundo encuentro mundial, que, de no ser por la referencia simbólica y nominal, apenas guarda relación con la iniciativa vasca en los años de la resistencia antifranquista. Ahora, con la recuperación de un nuevo estatuto de autonomía vasco, la incorporación a Europa, la crisis económica, el desempleo creciente y la violencia, el País Vasco se sitúa frente a una realidad compleja y desconocida que los organizadores del congreso quieren abordar en este encuentro de expertos. "Por esta razón", señala el secretario general del congreso, Luis Gurrutxaga, "creernos que este encuentro debe servir de revulsivo al desaliento ante la compleja situación que nos ha tocado vivir, a la vez que debe ser una plataforma para una reflexión colectiva".

En opinión del número uno del congreso, este encuentro científico-cultural, que atraerá a más de 9.000 personas, debería servir también de "escaparate de los trabajos de investigación que se desarrollan en el País Vasco".

Este segundo congreso, que permitirá poner en estrecho contacto a los expertos vascos con sus homólogos internacionales, responde al doble propósito de encauzar y fomentar la investigación propia en las más variadas disciplinas científicas, así como suscitar debates sobre temas de interés social, cuyas conclusiones puedan ser aplicadas por las instituciones vascas.

Un ambicioso programa

El lehendakari José Antonio Ardanza, que anunció su idea de convocar este congreso hace ya dos años, con motivo del bicentenario del conde de Peñaflorida, pone especial acento en la idea de propiciar un foro abierto y público en el que la sociedad pueda escuchar "esa palabra técnica sobre los problemas que le afectan". El congreso prevé el desarrollo de un total de 35 simposios monográficos, con sus correspondientes áreas, y dos exposiciones relacionadas con la obra pedagógica infantil vasca (de 1800 a 1976) y la lengua vasca.

Las grandes áreas de los 35 simposios están divididas en siete capítulos -ciencias exactas y naturales, ciencias médicas, ciencias de la ingeniería, humanidades y arte, ciencias sociales, ciencias económicas y ciencias jurídicas y políticas-, que, aunque en buena parte de sus enunciados se perfila una referencia genérica, cabe pensar que en numerosas ocasiones el País Vasco será un obligado punto de referencia.

La biología ambiental y las aplicaciones biotecnológicas de los estudios de membranas, así como las últimas tesis sobre materiales poliméricos, se debatirán en el área de ciencias exactas y naturales. El área de ciencias médicas tiene previsto abordar los avances en pediatría y los diagnósticos en psiquiatría. En el apartado de ciencias de la ingeniería figuran estudios sobre la energía, la inteligencia artificial y las nuevas técnicas de comunicación. El área de humanidades la integran tres simposios relacionados con filosofía, ética y religión, antropología y literatura.

El área de ciencias sociales es el más amplio, ya que engloba nueve simposios relacionados con la lengua vasca, geografía, población, drogodependencia, sociología del nacionalismo, evolución de las universidades, historia de Euskalherría, mujer y realidad social y psicología de la educación.

Los problemas actuales de la economía serán tratados en el área de ciencias económicas, que tiene previsto abordar la empresa vasca ante el futuro y el cooperativismo en el mundo. Finalmente, las ciencias jurídicas y políticas abarcan la crisis del Estado y Europa y los derechos históricos vascos. De los 35 simposios, 10 se celebrarán en San Sebastián (del 31 de agosto al 22 de octubre), 11 en Vitoria (del 21 de septiembre al 30 de octubre) y 14 en Bilbao (del 13 de octubre al 18 de diciembre).

Una reflexión colectiva

Más de 200 personas han participado en la organización del ambicioso programa de este congreso, que cuenta con un presupuesto oficial de 600 millones de pesetas. Los organizadores confían en poder ingresar casi 100 millones, de pesetas a través del pago de las inscripciones de los asistentes a las conferencias. Además de los 1.000 conferenciantes, el congreso mundial vasco admitirá un total de 1.500 cornunicaciones libres, elaboradas; por investigadores que deseen presentar su texto. No obstante, los organizadoras temen la intención de dar prioridad a los comunicantes vascos, a fin de que el congreso sirva de plataforma de lanzamiento a los vascos que trabajan en los ambientes universitarios del País Vasco.

Los promotores del congreso subrayan el carácter internacional del encuentro, ya que más de la mitad de los invitados son ciudadanos extranjeros, fundamentalmente europeos y norteamericanos. La oferta de un foro abierto de intercambio de ideas entre los especialistas extranjeros sobre los temas más relevantes de la sociedad vasca, "pero mirando al mundo y con proyección hacia el futuro", descansa sobre la idea que! ha inspirado el lema de este encuentro.

Para Luis Gurrutxagra, "el congreso no pretende resolver problemas cotidianos, pero de esa reflexión colectiva, profunda y cualificada podremos extraer líneas maestras para ir aplicando soluciones concretas en nuestro propio país". Este ingeniero, designado por el presidente del Gobierno vasco para asumir la secretaría general del congreso, suscribe la idea del lehendakari al señalar que este encuentro será una buena oportunidad para demostrar que "en este país hay inquietudes superiores y que Euskadi, como todos los demás pueblos, trabaja, estudia y es capaz de crear".