Una ola de atentados salpica en Perú la polémica sobre las nacionalizaciones

La continuidad con que prosiguen en Perú los mítines públicos en pro y en contra de la futura nacionalización del sistema financiero privado se ha visto alterada por una ola de atentados que en los últimos tres días ocasionó la explosión de tres coches bomba, el descarrilamiento de un tren cargado de rninerales y el secuestro de un menor por el que se pide un rescate de 200.000 dólares (unos 15 millones de pesetas). El presidente de la República, Alan García, presidirá hoy y mañana sendos mítines en Lima, la capital peruana, en defensa de la nacionalización. El fin de semana hablará en el sur del país sobre el mismo tema en diversas concentraciones públicas.

Por su parte, el escritor Mario Vargas Llosa, quien encabeza la protesta conservadora a la medida del Gobierno, será hoy la principal figura de una concentración en su tierra natal, Arequipa. Ésta será la primera manifestación provincial de la derecha peruana que dirigirá el novelista, de las varias que ya anunció, si la propuesta es aprobada en un congreso la semana entrante.

García calificó el pasado lunes de "muy injustas" las apreciaciones de Mario Vargas Llosa sobre su Gobierno, del que el escritor dijo que está influenciado por asesores de la época del ex presidente Velasco Alvarado. García reiteró su respeto y admiración a Vargas Llosa como literato y dijo que le rendía homenaje como tal, pero que lamentaba que fuera "injusto en sus apreciaciones políticas".

Por otra parte, el lunes se produjeron diversos incidentes en el Parlamento peruano que obligaron a la suspensión de las sesiones en las dos Cámaras. En el hemiciclo del Senado proseguían en huelga de hambre siete parlamentarios de Izquierda Unida (IU), la segunda fuerza electoral del país, quienes desde hace siete días mantienen esta actitud.