Los terroristas usaron 20 litros de líquido inflamable para multiplicar el efecto de la bomba del hipermercado
La explosión en el centro comercial Hipercor de Barcelona, que causó la muerte a 15 personas y heridas de diversa consideración a otras 36, fue provocada por una bomba incendiaria, compuesta por 25 kilos de amonal -el explosivo utilizado últimamente por ETA- y unos 20 litros de líquido inflamable, aún por determinar. El líquido provocó inmediatamente un incendio y una espesa humareda, causante de la mayor parte de las víctimas, que murieron por asfixia. La composición del artefacto parece confirmar la voluntad de causar un siniestro sin precedentes, lo que viene a ratificar que la organización terrorista ETA Militar ha ordenado a sus comandos que realicen atentados indiscriminados. Según creen los servicios de información, la organización ha establecido además que estos ataques contra la población civil se realicen fuera del País Vasco y Navarra. Los responsables de la lucha antiterrorista han acordado solicitar al Gobierno francés que intensifique la colaboración.
La cúpula (le ETA Militar ha enviado en el último mes a los comandos de la organización una serie de directrices generales sobre objetivos susceptibles de atacar, según. informaciones que obran en el Ministerio del Interior. Estas informaciones, recabadas por los servicios policiales, permiten presuponer que hay órdenes de la, dirección etarra para actuar indiscriminadamente fuera de los territorios que la organización considera integrados en Euskadi.Fuentes; de la seguridad del Estado han señalado que la ejecutiva de ETA, ordena las directrices generales y que luego los comandos -en el atentado del viernes, el comando Barcelonaeligen los objetivos concretos, en donde pesa el nivel de información obtenido previamente.Tras el atentado del viernes, altos cargos del Ministerio del Interior, bajo la presidencia de su titular, José Barrionuevo, martuvieron hasta la madrugadade ayer una reunión de urgencia en donde se analizó el atentado en la capital catalana. La reunión continuó durante la mañana de ayer con la ausencia de Barrionuevo, quien se entrevistó con el presidente: y -vicepresidente del Gobierno, Felipe González y Alfonso Guerra, respectivamente, a los que dio cuenta de lo acordado.
Paralelamente, el gobernador civil de Barcelona, Ferran Cardenal, se reunió en Barcelona con el responsable de la lucha antiterrorksta, Manuel Ballesteros García, el comisario general de Información, Jesús Martínez Torres, y los responsables de los grupos policiales que investigan los movirnientos de ETA en Cataluña para conseguir una mejorcoordinación entre la Brigada Regional de Información y el Grupo Especial de la IV Zona de la Guardia CivilControl de fronteras
Durante esta reunión, la policía entregó a Cardenal un primer análisis técnico de la bomba utilizada por ETA. Según los artificieron del Cuerpo Nacional de Policía, la bomba estaba compuesta por unos 25 kilos de amonal y dos botellas de plástico que contenían cada una unos 10 litros de líquido inflamable, cuya composición exacta se desconocía ayer. Este hecho confirma el carácter incendiario de la explosión, que fuentes oficiales negaron tras el atentado.
En la reunión celebrada el viernes por la noche en Madrid bajo la presidencia del ministro Barrionuevo se acordó mantener el actual despliegue policial en Barcelona (véase EL PAIS de ayer) y aumentar el nivel informativo de los servicios policiales sobre ETA, además de solicitar mayor colaboración de Francia en la lucha antiterrorista.
En este sentido, el ministro francés encargado de la seguridad, Robert Pandraud, anunció ayer en París el refuerzo de las medidas de control de fronteras terrestres y marítimas entre Francia y España. Esta medida tiene como objetivo fundamental dificultar los envíos de material (armas y explosivos) de la organización terrorista al comando Barcelona.
Por otro lado, los altos cargos del Ministerio del Interior han desestimando encomendar a efectivos policiales la vigilancia de grandes almacenes y supermercados por entender que "habría que triplicar los actuales miembros de los cuerpos de seguridad".
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