Anuladas las sanciones contra un funcionario acusado de malversación de fondos

La Sala Quinta de lo Contencioso-administrativo del Tribunal Supremo ha anulado las sanciones que el 19 de diciembre de 1983 impuso el Ministerio de Educación y Ciencia a Pedro Arranz, a la sazón director del Instituto Nacional de Bachillerato a Distancia (INBAD), por presunta malversación de fondos".

Las sanciones ahora anuladas, consistentes en la suspensión de funciones por un año- y la pérdida de 20 días de remuneraciones, le fueron impuestas a Pedro Árranz, catedrático de Filosofía de bachillerato, por una resolución del entonces subsecretario del departamento, José Torreblanca, a instancias del directo general de Enseñanzas Medias José Segovia.Por su sentencia, el Supremo anula la de la Sala Tercera de la Audiencia Nacional, de fecha 26 de abril de 1986, que había estimado sólo en parte el recursocontencioso-administrativo interpuesto contra la resolución sancionadora del Ministerio a Pedro Arranz. El alto Tribunal declara la nulidad de dichas sanciones, según el texto de la sentencia de la Sala Quinta, dictada el 18 de marzo pasado, "al infringir el ordenamiento jurídico por desviación de poder la resolución del subsecretario de Educación y Ciencia de 19 de diciembre de 1983".

El cese fulminante de Pedro Arranz como director del INBAD fue dispuesto por el entonces director general de Enseñanzas Medias, José Segovia, apenas una semana después de la constitución, tras las elecciones de 1982, del primer equipo de gobierno del Ministerio de Educación y Ciencia. La decisión ministerial fue interpretada por los letrados que han defendido los intereses del profesor sancionado como parte de una "política de exaltación de los nuevos administradores frente a la presunta corrupción de los antiguos".

Las informaciones oficiales sobre la presunta existencia de corrupciones e irregularidades en la gestión del INBAD, apuntaban, entre otras, "anomalías de tesorería relativas a libretas de imposición a plazo fijo y sus intereses consecuentes, deudas pendientes, devolución de dinero por matrículas anuladas y nóminas por valor de diez millones de pesetas, sin ninguna base legal de justificación". La Administración estimó en unos 98 millones de pesetas el importe de la cantidad presuntamente malversada.

Irregularidades formales

Nada más producirse las primeras informaciones inculpatorias sobre la presunta gestión irregular de Pedro Arranz, el anterior director general de Enseñanza Medias, Raúl Vázquez, hizo pública su absoluta confianza en la honestidad de aquél, así como su certeza moral de que no había malversado ni una sola peseta. La Sala Quinta señala, en uno de los fundamentos de Derecho, de su sentencia, que el expediente disciplinario abierto por la Administración se debió a una tergiversación de la irregular gestión económica del INBAD, "falso supuesto", añade el « Tribunal "que acarreó la destitución de Pedro Arranz como director, a partir y asumir la Administración de una realidad divergente de la realidad verdadera, constando en dicho expediente que la relación de Pedro Arranz con la Administración estuvo presidida por el cumplimiento de los deberes de fidelidad, lealtad y obediencia y por el principio de responsabilidad .