Los estudiantes de enseñanza media de Vigo se manifiestan contra la policía

Unos 600 estudiantes de enseñanza media -2.000, según los convocantes- se manifestaron a mediodía de ayer pacíficamente en Vigo para protestar contra las actuaciones policiales durante las movilizaciones habidas en las dos últimas semanas. Al final pidieron la dimisión del gobernador civil y el delegado provincial de Educación de Pontevedra. La manifestación coincidió con la denuncia del acuerdo firmado el pasado lunes por la conselleira de Educación de la Xunta, María Jesús Sainz, y la Coordinadora de Estudiantes.Portavoces de la coordinadora anunciaron la próxima presentación de querellas por usurpación contra algunos de los firmantes, que, según dijeron, no pertenecían a la mesa de negociación. Expresaron también su intención de "demostrar nuestra capacidad de convocatoria y movilización si la conselleira no aclara y revisa lo ocurrido el lunes y se niega a firmar un acuerdo con nosotros".

De esta forma, lo que parecía inicialmente un paso adelante puede convertirse en un nuevo obstáculo para la normalización de la vida académica en la mayor parte de los centros públicos de enseñanza medía de la ciudad de Vigo, donde la mecha de la movilización prendió con especial fuerza cuando ya se había extinguido en el resto del país.

Las reivindicaciones estudiantiles se replantearon en Vigo tras la firma de los acuerdos con el ministro de Educación y en la expectativa de la aplicación de esos acuerdos por parte de la Consejería de Educación de la Xunta, que dispone de amplias competencias al respecto.

Incidentes

Un movimiento estudiantil fragmentado entre coordinadoras, sindicato y plataforma vio cómo se retrasaban las posibilidades de diálogo con las autoridades educativas gallegas y se establecían contactos tan sólo con la coordinadora.La plataforma apretó el acelerador de la movilización y, tras las primeras escaramuzas en distintos puntos de Galicia, el grueso de la protesta se desarrolló en escenarios vigueses, con cortes de tráfico, barricadas y lanzamiento de piedras y cócteles molotov contra la fuerza pública. Varios estudiantes fueron detenidos temporalmente, y algunos agentes y manifestantes resultaron contusionados en las refriegas. En algún momento, la fuerza pública irrumpió en los recintos educativos sin la pertinente autorización de los directores, lo que exasperó más los ánimos y proporcionó nuevos argumentos a los partidarios de la acción directa.

Se llegó así a la manifestación de ayer, horas antes de que la conselleira de Educación accediese por fin a dialogar con los representantes de la Plataforma Aberta de Estudiantes, inspiradora fundamental de las movilizaciones y decidida a seguir planteando batalla en la calle si fuere necesario.