Aquino teme que la muerte de Olalia suponga el fin del diálogo con la guerrilla
ENVIADO ESPECIAL, El asesinato del dirigente izquierdista Rolando Olalia forma parte de una estrategia destinada a justificar un golpe de Estado contra la presidenta de Filipinas, Corazón Aquino, según señalaban ayer de forma coincidente fuentes del Gobierno y de la oposición. Cory Aquino se ha mostrado especialmente preocupada, según fuentes gubernamentales citadas ayer por el diario The Manila Chronicle, por el efecto que este asesinato pueda tener en la marcha de las conversaciones de paz con la guerrilla, que han quedado interrumpidas indefinidamente.
El citado diario afirma que la presidenta ha enviado un mensaje a los guerrilleros en el que les pide que "no caigan en la trampa que se les ha tendido".Algunos asesores de la presidencia están convencidos de que el efecto del crimen, ocurrido 24 horas antes de la reunión en la que previsiblemente se obtendría el acuerdo definitivo para una tregua de 100 días con la guerrilla del Nuevo Ejército del Pueblo (NEP), estaba "perfectamente calculado".
El ministro de Defensa, Juan Ponce Enrile, y otros militares filipinos habían criticado hasta ahora con dureza la política de la presidenta Aquino con la guerrilla comunista, que consideraban débil.
Uno de los principales compañeros de Olalia en la dirección del Partido NG Bayan (Partido del Pueblo), Bernabé Buscayno, antiguo líder del NEP, manifestó ayer que el asesinato del jefe de su partido está destinado a que "los antiguos detenidos políticos [casi todos guerrilleros comunistas] abandonen la lucha pacífica y regresen a las montañas".
Dirigentes de izquierda reiteraron ayer que están decididos a convocar acciones de masas en demanda de una investigación en profundidad de la muerte de su líder. Crispín Beltrán, portavoz del sindicato Kilusang Mayo Uno (Movimiento Uno de Mayo), organización que también presidía Olalia, ha advertido que "sólo la destitución de Ponce Enrile puede impedir que prosigan las movilizaciones".
En Tokio, el ex dirigente comunista José María Sison, cofundador junto con Olalia del Partido NG Bayan, ha declarado que el ministro de Defensa es "personal y directamente responsable" del asesinato de su compañero, y mencionó al capitán de la Armada, Féliz Turingan, como el hombre clave en la organización del atentado.
El capitán Turingan forma parte del grupo de oficiales reformistas conocidos por sus discrepancias con la presidenta y en los que se centran todas las sospechas sobre la eventual organización de un golpe militar. Este grupo, así como todos los implicados en un supuesto intento de derrotar a Aquino durante su reciente viaje a Japón, serán investigados bajo la responsabilidad directa del jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, general Fidel Ramos.
Para hoy está convocada la segunda acción de protesta por. la muerte de Olalia. La, concentración comenzará pocas horas después de que la presidenta Aquino tenga oportunidad de comprobar su popularidad en un acto de masas que se celebrará en Manila para recibir la Primera carrera alrededor de la tierra, un acto de paz. organizado en todo el mundo por la Unicef.
Con esta manifestación se entra en una semana que se espera de gran tensión, por las protestas callejeras que convocará la izquierda. El lunes dará comienzo lo que puede ser la primera huelga general que conoce este país, ya que la ley marcial bajo la que gobernaba Ferdinand Marcos impedía acciones de ese tipo.
El acto de mayor participación popular puede ser, el próximo jueves, el entierro de Olalia, que la izquierda intentará convertir en una manifestación de protesta similar a la que se produjo en 1983 por la muerte del líder opositor Benigno Aquino, esposo de la actual presidenta.
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