Científicos franceses construyen un globo para investigar la cúpula amazónica
La bóveda del bosque amazónico, considerado como el gran pulmón verde del planeta, esconde tesoros de flora y fauna hasta ahora desconocidos. Para investigarla, un grupo de científicos franceses ha construido un aparato conocido como la balsa de las cimas. Se trata de un globo de aire caliente de 3.000 metros cúbicos de capacidad, de cuyo centro cuelgan cinco triángulos equiláteros en posición horizontal unidos por su vértice superior. Este artefacto es capaz de posarse incluso sobre los árboles más altos.Francis Hallé, del Instituto de Botánica de Montpellier, el especialista en globos aerostáticos Daniel Cleyet-Marrel, que ya consiguiera alcanzar la cima del Mont Blanc, y el industrial Michel Gaubert, confian que con este artilugio podrán tomar muestras, fotografiar y clasificar una fauna y flora inexplorada hasta el presente y excepcionalmente rica. Las nueve décimas partes de las flores y de las frutas, atraídas por la luz del sol, suben hacia arriba hasta atravesar las últimas copas de los árboles más altos de la selva amazónica.
Los palinólogos -especialistas en el estudio de los pólenes-, botánicos, zoólogos y médicos especialistas en parasitología esperan recoger pólenes, observar las lianas y clasificar los insectos, pájaros y mamíferos con el interes adicional de poder clasificar alguna especie nueva desconocida hasta ahora por el hombre.
La balsa de las cimas ha sido ya probada varias veces por sus inventores con resultados satisfactorios. A finales del mes pasado Daniel Cleyet-Marrel se posó sin problemas en el río Compté, en la Guayana francesa.
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