El público acogió con calor un festival de cine español en Los Angeles

La mayor parte de las 37 películas proyectadas en un festival de cine español organizado por la filmoteca de la universidad de California Los Ángeles (UCLA) que terminó ayer, fue acogida con gran éxito de público y crítica. En la mayoría de las sesiones se agotaron las 300 localidades de la filmoteca; las películas estrella motivaron colas ante la puerta de hasta 400 personas.Parte del éxito se debe a la acertada selección de películas (a pesar de errores graves, como la no presentación de Río abajo, de José Luis Borau, por considerarse una película -no suficientemente española), que, además de casi la totalidad de los filmes de Saura, incluyó Matador, ¿Qué he hecho yo para merecer esto? y Laberinto de pasiones, de Pedro Almodóvar; Demonios en el jardin y La noche más hermosa, de Manolo Gutiérrez Aragón; Sé infiel y no mires con quién, de Fernando Trueba; Las bicicletas son para el verano, de Jaime Chávarri; Los santos inocentes y La colmena, de Mario Camus; Fanny pelopaja y Tiempo de silencio, de Vicente Aranda; Lola, de Bigas Luna; El Sur, de Víctor Erice; La muerte de Mikel, de Imanol Uribe; Vestida de azul, de Antonio Giménez Rico; Tasio, de Montxo Armendáriz, y Tras el cristal, de Agustín Villaronga.

El festival se abrió con la proyección de Matador, presentada por su director, Pedro Almodóvar, y su protagonista, Assumpta Serna. Ese día hubo que tomar medidas especiales, como el cierre del aparcamiento, para detener la avalancha de público que quería ver la película y que era suficiente para llenar dos o tres veces la sala. Y es que Almodóvar -el gran éxito del festival- se ha convertido en el director -favorito de la intelligentsia de Los Ángeles desde que aquí se exhibió en cines de arte, pero con éxito comercial, ¿Qué he hecho yo para merecer esto?.

Sé infiel y no mires con quién, de Fernando Trueba, gustó mucho entre gente de la industria. Otro éxito a destacar fue el de Los santos inocentes, de Camus, que causó una honda impresión en la audiencia. El cine español está de moda en Estados Unidos, y también casi todo lo que se refiere a España. Parte del éxito del festival hay que atribuirlo al interés con que los medios de comunicación en español acogieron el proyecto, casi como algo propio.