La CE relaciona a Gaddafi con el terrorismo
La Comunidad Europea (CE) adoptó ayer, en un intento de evitar una intervención militar de EE UU contra Libia, sanciones diplomáticas contra el régimen de Muammar el Gaddafi, al que, por primera vez, relaciona expresamente con el terrorismo internacional. Los 12 ministros de Asuntos Exteriores comunitarios -Grecia y Luxemburgo estuvieron representados por sus viceministros-, reunidos en La Haya, ahogaron por una solución política de la crisis y propusieron una acción concertada con los países árabes para hacer frente a las actividades terroristas.El ministro español de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, confirmó, al término de la reunión, que el embajador de Estados Unidos en las Naciones Unidas y enviado especial del presidente Reagan a Europa para discutir con los aliados la situación en el Mediterráneo, Vernon Walters, estuvo el sábado en Madrid y se entrevistó con el presidente del Gobierno.
Fernández Ordóñez no quiso dar ninguna información suplementaria sobre este tema y se limitó a comentar que el Gobierno ha mantenido en secreto la visita hasta ahora porque así había sido acordado previamente.
La reunión de La Haya, celebrada a solicitud de España e Italia, se cerró con un comunicado firmado por los 12 en el que, sin mencionar a Estados Unidos, se pide a las partes implicadas en el conflicto que actúen con "moderación".
Al mismo tiempo, se condena enérgicamente la violencia terrorista y, específicamente, a "Libia entre otros estados implicados" en el terrorismo.
Como medidas contra el régimen de Gaddafi, los doce han decidido:
- Reducir el personal de las misiones diplomáticas y consulares de ese país.
- Restringir la libertad de movimientos del personal diplomático y consular libio.
- Imponer condiciones más estrictas para la concesión de visados a los ciudadanos libios.
- Ratificar el embargo de armas y equipamiento militar decidido por la Comunidad Europea en la reunión sobre terrorismo celebrada el pasado mes de enero.
Los ministros de Exteriores han advertido que la CE se reserva el derecho de tomar nuevas medidas y han decidido informar a los países árabes del resultado de esta reunión e invitarlos a participar en una política coordinada contra el terrorismo internacional.
Diálogo euroárabe
La apertura de un diálogo euroárabe sobre terrorismo fue propuesta por el ministro español y defendida, entre otros, por el jefe de la diplomacia de la República Federal de Alemania, Hans Dietrich-Genscher, quien, según fuentes de su país, se mostró partidario de cualquier medida que favorezca el aislamiento de Gaddafi en el seno del mundo árabe.
A solicitud de los ministros de España e Italia, la CE rechazó "las amenazas inaceptables formuladas por los dirigentes libios contra Estados miembros, advirtiendo deliberadamente del recurso a actos de violencia y amenazando directamente a Europa". "Toda acción de este tipo", añade el comunicado final de la reunión, "encontrará una respuesta apropiada por parte de los doce".
La CE considera que "los estados que apoyan abiertamente el terrorismo deberían ser inducidos a renunciar a ese papel y a respetar las reglas del derecho internacional". "Exhortan a Libia", continúa la declaración final, "a actuar en consecuecia".
Los países europeos se declaran "convencidos" de que los atentados terroristas no sirve ninguna causa política, "cualquiera que sea la que sus autores pretendan". "Atentados como los perpetrados recientemente contra el avión de la compañía TWA y en una discoteca de Berlín no podrán jamás ser justificados".
El acuerdo sobre el comunicado final, fruto de más de cinco horas de negociaciones, no fue fácil de conseguir. El grado de la condena a Libia y la referencia a las responsabilidades de Estados Unidos en el aumento de la tensión con el anuncio de planes militares, fueron los dos temas en los que, básicamente, se centró el debate.
El ministro de Asuntos Exteriores del Reino Unido, Geofrey Howe, puso como ejemplo en su intervención la situación de su país, que en 1984 rompió relaciones diplomáticas con Libia y cerró la Oficina Popular (embajada) en Londres a raíz de unos incidentes en los que murió una policía por disparos de agentes libios. Howe sugirió medidas similares a los demás países de la CE, así como las restricciones de visados, que Londres sólo concede a los ciudadanos libios en casos muy especiales.
En el polo opuesto se colocó Grecia, cuyo ministro de Asuntos Exteriores no acudió a la reunión de ayer por razones que ningún diplomático consultado pudo explicar (el ministro luxemburgués convalece de una reciente intervención quirúrgica). Grecia se opuso desde un principio a la adopción de medidas económicas contra el régimen de Gaddafi y el tema apenas fue, por tanto, abordado en la reunión. Todas las decisiones comunitarias deben de ser adoptadas por consenso.
Hubo acuerdo desde un principio en lo que todo el mundo consideraba la misión principal de esta cita: la insistencia en las medidas políticas y diplomáticas frente a las opciones militares. El propio Howe dijo, según fuentes diplomáticas de su país, que "en Londres no sorprendería una acción militar de EE UU en el caso de que los europeos no hiciéramos nada".
Coincidencia italo-española
Italia y España fueron los primeros en tomar la palabra al ser los países convocantes de la reunión, fruto de la conversación el viernes entre Felipe González y su homólogo-italiano, Bettino Craxi. Italia y España no presentaron una posición conjunta, pero coincidieron en un 80%, según fuentes diplomáticas. Fernández Ordóñez destacó la necesidad de que Europa "recupere la iniciativa" sobre los acontecimientos que ocurren en su territorio. Rechazó tanto las amenazas libias contra España como el uso de la fuerza militar. Insistió en la voluntad española de cooperar en la lucha contra el terrorismo y dijo que Europa tiene dos diálogos incompletos: con EE UU y con el mundo árabe. Para Ordóñez el resultado de la reunión es satisfactorio.
Los doce han decidido, por ultimo "dar instrucciones a los expertos [que trabajan ya en comisión], definir inmediatamente las medidas más apropiadas a tomar, en particular, medidas de seguridad, aplicaciones de los convenios internacionales relativos a los privilegios e inmunidades diplomáticas y consulares y la seguridad de la aviación civil". El informe de los expertos será examinado en la reunión de ministros que se celebrará la próxima semana.
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