Reagan pide al Congreso 100 millones de dólares de ayuda para la 'contra'

El presidente norteamericano, Ronald Reagan, pidió formalmente ayer al Congreso de su país que otorgue 100 millones de dólares (unos 14.200 millones de pesetas) en ayuda militar y humanitaria para los rebeldes que luchan contra el Gobierno sandinista nicaragüense. El Congreso cortó la ayuda militar a la contra en 1984, pero aprobó el año pasado la concesión de 27 millones de dólares en asistencia humanitaria. El mensaje de Reagan pide que el Congreso le autorice a entregar a la contra 70 millones de dólares en ayuda militar y 30 millones de dólares en apoyo humanitario en los próximos 19 meses.

Si el Congreso aprueba la petición de fondos, 25 millones de dólares podrían estar disponibles de inmediato, mientras que el resto sería entregado en intervalos de 90 días, hasta septiembre de 1987.El presidente del Comité de Inteligencia del Senado, Dave Durenberger, dijo ayer que es probable que el Congreso apruebe los fondos para la ayuda militar a los rebeldes. En cuanto al resto de la ayuda, es previsible que se incluya una prohibición que impida su utilización en la compra de armamentos. Muchos congresistas, encabezados por el portavoz del grupo demócrata, Thomas O'Neill, se han mostrado abiertamente en contra de aumentar la ayuda militar a los rebeldes antisandinistas.

Reagan justificó su petición con el argumento que el apoyo a la contra es "una prioridad fundamental para la seguridad nacional de Estados Unidos". "Si los enemigos de la democracia, a algunos miles de kilómetros de aquí, comprenden la importancia estratégica de Nicaragua, entenderán que Nicaragua puede propiciar la desestabilización de toda América Central", declaró Reagan en su mensaje. "Por ello, nosotros, los norteamericanos, debemos comprender que Nicaragua es un problema de política exterior de una importancia suprema, que afecta al corazón de la libertad y del porvenir de nuestro país", dijo.

Reagan dijo que aún confía en una solución pacífica al conflicto nicaragüense -a través del Grupo de Contadora, compuesto por Colombia, México, Panamá y Venezuela- y que, si se logra algún acuerdo aceptable para ambas partes, el resto de la ayuda podría ser destinado a asistencia a todos los Gobiernos centroamericanos, incluyendo el nicaragüense.

La Administración de Reagan ha llamado a los rebeldes "luchadores de la libertad" y ha acusado al régimen sandinista de apoyar la subversión en Centroamérica, junto a Cuba y la URSS.

Advertencia cubana

Cuba, por su parte, pidió ayer una urgente condena internacional contra la concesión de ayuda militar norteamericana a la contra nicaragüense, que "además de traer más muerte a Nicaragua está destinada a agravar la situación centroamericana", según el texto de un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores cubano.El comunicado recuerda que la posición cubana quedó clara en el reciente congreso del Partido Comunista de Cuba, realizado este mes. En aquella ocasión, Fidel Castro advirtió que, si Estados Unidos aumentaba su ayuda a la contra, Cuba haría lo posible por incrementar su ayuda al Gobierno sandinista.

Por otra parte, fuentes del Pentágono anunciaron ayer la próxima iniciación de nuevas maniobras militares en Honduras, que incluyen la construcción de una pista de aviación cerca de la frontera nicaragüense. El portavoz oficial, Robert Sims, confirmó que se realizarán ejercicios militares en la zona, pero no precisó la fecha.