Oleada de violencia en Colombia, a tres semanas de los comicios legislativos

La campaña para las elecciones legislativas de Colombia del 9 de marzo está enmarcada en un inestable panorama: ha sido asesinado uno de los fundadores del Movimiento Diecinueve de Abril (M-19), se multiplican los combates entre la guerrilla y el Ejército, y los campesinos emprenden el éxodo de sus tierras, hastiados de la violencia.El cadáver de Augusto Lara, uno de los fundadores del M-19, fue hallado, sin documentación, atado, amordazado y con cinco impactos de bala, en un suburbio del sureste de Bogotá. Su madre, quien lo identificó más tarde, confirmó que Lara continuaba militando en el M-19.

Entretanto, en el municipio de Yondó, región centro-norte del país, se desarrollan intensos combates entre la Quinta Brigada del Ejército y el 24º Frente de la guerrilla comunista Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Los informes del Ministerio de Defensa señalan que una decena de soldados ha muerto en los enfrentamientos. La espiral de violencia en esa zona se originó al comenzar el Ejército operaciones contra las FARC, tras conocerse la denuncia de la compañía multinacional Shell de que los guerrilleros les exigían 600.000 dólares (unos 90 millones de pesetas) a cambio de dejarles realizar en paz sus trabajos de explotación petrolera. La firma europea se negó a pagar y suspendió sus trabajos "hasta que haya un clima favorable", dijeron directivos de la Shell.

La violencia en esa región ha llegado a tal punto que unos 900 campesinos de Yondó emprendieron un éxodo masivo hacia la ciudad de Barrancabermeja, 500 kilómetros al norte de Bogotá, huyendo de los enfrentamientos entre Ejército y guerrilleros, que han costado la vida a varios agricultores. "Les dejamos la región sola para que se maten entre ellos", dijo un vecino de Yondó.

Pese a este recrudecimiento de la violencia, el Gobierno garantiza "la celebración de elecciones limpias y sin violencia" el próximo 9 de marzo, cuando los colombianos deberán elegir 114 senadores, 199 representantes a la Cámara y más de 9.000 cargos municipales y provinciales. El M-19, por medio de su máximo comandante, Álvaro Fayad, ha manifestado que no pretende sabotear los comicios.