El alcalde de Burgos es contrario a la rehabilitación del teatro Principal

La rehabilitación del teatro Principal, de Burgos, contemplada dentro de un programa global de restauración de teatros singulares en el que cooperan los ministerios de Cultura y Obras Públicas, corre serio riesgo de quedar bloqueada por la actitud contraria del alcalde, José María Peña, y el Grupo Popular del Ayuntamiento -propietario del inmueble-, que consideran que la restauración de este teatro, un edificio isabelino del siglo XIX, no es prioritaria para la ciudad.

La actitud del alcalde de oposición a la rehabilitación del teatro Principal de Burgos está siendo duramente criticada por los partidos socialista y comunista, así como por la denominada Comisión Pro Teatro Principal, cabeza visible de un movimiento ciudadano que en 1982 consiguió 10.000 firmas de ciudadanos que se oponían al proyecto del alcalde de convertir el teatro en oficinas municipales.La presión popular y la decisiva intervención de la Dirección General de Bellas Artes en defensa de la continuidad de uso del edificio aparcaron el proyecto de construcción de oficinas, y no parecía quedar la menor duda de que el teatro iba a ser rehabilitado y convertido en centro vivo de cultura, máxime cuando en diciembre de 1984 el Ayuntamiento llegó a un preacuerdo con el Gobierno central y el autonómico para la rehabilitación conjunta del edificio.

Reparto de dinero

El mencionado acuerdo, pendiente únicamente de la firma de un convenio entre la Junta autonómica y el Ayuntamiento, suponía que el Ministerio de Obras Públicas aportaba 90 millones de pesetas; Bellas Artes, 60, y la Consejería de Cultura de la Junta y el Ayuntamiento, otros 60 cada uno; en total, 270 millones para la restauración del edificio.Por parte de la Administración central y la autonómica, estas cantidades están previstas, y, según manifestó hace unos días en Burgos Javier Sáenz de Cosculluela, ministro de Obras Públicas, este ministerio "tiene todo dispuesto, presupuestaria y técnicamente, para acometer la rehabilitación inmediata del teatro Principal".

Sorpresa ciudadana

La comisión ciudadana de defensa del teatro Principal de Burgos, que se ha visto sorprendida por el cambio de criterio del Ayuntamiento, no puede entender que éste se vuelva atrás en este acuerdo, que únicamente le supondría desembolsar 60 millones de pesetas, a pagar en tres anualidades."No podemos consentir", señalan los miembros de la comisión ciudadana de defensa del teatro, «que la ciudad de Burgos pierda 210 millones de pesetas ofertadas por las administraciones central y regional, de no llevarse a cabo esta restauración por incumplimiento de palabra por parte del señor alcalde".

Prioridades

En cuanto al tema de las prioridades, esgrimido por el alcalde, la comisión se pregunta "si prioridades se pueden considerar granitar el paseo de los Cubos, recuperar el palacio de Castilfalé con un presupuesto de 110 millones de pesetas, las obras recientes del monasterio de San Juan por 40 millones de pesetas, sin olvidar los 500 millones de pesetas que hubiese costado la instalación de las oficinas del Ayuntamiento en el teatro Principal de Burgos".Para el partido comunista, "la pretensión de bloqueo de la derecha municipal" obedece únicamente a su pretensión de "negociar el uso o destino del teatro", y sus verdaderas intenciones son "impedir su recuperación y reapertura contra lo que es un deseo mayoritario entre los burgaleses".

De no variar la postura de la mayoría municipal, el teatro, cerrado como tal desde hace unos 40 años, no podría, presumiblemente, ser recuperado, con el consiguiente peligro para su integridad, ya que, según Sáenz de Cosculluela, la posibilidad de la enajenación del edificio es impensable, entre otras cosas porque supondría retraer fondos del programa global en detrimento de los teatros de otras ciudades.