Cadena humana en Madrid entre las embajadas soviética y de EE UU para entregar un mensaje pacifista

Varios centenares de personas participaron anoche en una manifestación en forma de cadena humana entre las embajadas de la URSS y de EE UU en Madrid, coincidiendo con la cumbre entre el presidente nortamericano, Ronald Reagan, y el máximo dirigente soviético, Mijail Gorbachov, en Ginebra. Durante el acto -organizado por el Movimiento por la Paz, el Desarme y la Libertad-, una comisión donde figuraban la senadora del PSOE Francisca Sauquillo, el cantante Miguel Ríos y la actriz Núria Espert entregó un mensaje de paz a ambas embajadas.

La manifestación comenzó ante la Embajada de la URSS al son de una charanga que declaró inaugurado el comienzo de la cadena humana que debía cubrir un recorrido de aproximadamente 1,5 kilómetros, pero que quedó sin completar en varios puntos. Mientras, la comisión de representantes entregó al primer secretario de la Embajada soviética el mensaje, en el que se expresa la preocupación de los manifestantes ante los resultados de las reuniones que se desarrollan actualmente en Ginebra.El texto, que está dirigido a Ronald Reagan y Mijail Gorbachov, expresa el interés y esperanza de los manifestantes "por las propuestas efectuadas por ambos lados en semanas precedentes sobre la posibilidad de reducir sustancialmente el armamento nuclear -de las dos partes se han hecho proposiciones concretas al respecto-, que significan un signo de esperanza y la confirmación sustancial de las tesis pacifistas de que un desarme sustancial no tiene por qué representar un factor de desequilibrio".

"Como ciudadanos y movimientos comprometidos con la paz", afirma más adelante el comunicado, "la posibilidad de obtener un avance en el desarme, no sólo de la tierra sino del espacio, reviste una mayor importancia por dos razones."

Nicaragua y Afganistán

"De una parte", prosigue el comunicado, "nosotros hemos sido contrarios a la instalación de nuevos misiles en Europa porque consideramos que es mala política aumentar el nivel de armamentos para después ir con más fuerza a una negociación de desarme".

"En segundo lugar", prosigue el documento, "ustedes tienen una ocasión excelente par disipar cualquier duda que pueda existir entre las jóvenes generaciones acerca de su capacidad para llegar a acuerdos efectivos".

"Una de las reglas profundamente defendidas por la ONU", se dice en otro párrafo, "es el derecho a la libre determinación de los pueblos. En ese sentido exigimos que sea estrictamente cumplido en toda situación, desde Nicaragua hasta Afganistán. Asimismo, demandamos el respeto de los derechos humanos y la libertades políticas en todas las naciones que componen la comunidad internacional".

"En espera de que se vea animado por el espíritu que ha motivado a las Naciones Unidas en su proclamación de 1986 como Año Internacional de la Paz", concluye el comunicado, "reciban un cordial saludo".

Algunas antorchas salpicaban el otro extremo de la manifestación, donde otra charanga animaba a los manifestantes, que intentaban luchar contra los rigores del frío saltando al ritmo de la música.

Los miembros de la cadena saludaban a su paso a los componentes de la comisión, mientras en otros casos reinaba la incertidumbre y preguntaban: "¿Qué hay que hacer ahora?".

"Márcate una Marcha por la paz", pidieron, más animados, los miembros más jóvenes de la cadena a Miguel Ríos, sin que se cumplieran sus deseos hasta el final del acto, y sólo a través de una grabación, que se perdió por un altavoz.

Los organizadores de la manifestación se declararon satisfechos por el desarrollo del acto, al que calificaron de "positivo" y "necesario por lo que implica para nuestro futuro y supervivencia".