La recaudación de los teatros madrileños aumentó la temporada pasada un 23%

Las salas de teatro madrileñas recaudaron 2.000 millones de pesetas en la temporada 1984-1985, lo que supone un incremento del 23% sobre los 1.573 millones recaudados en la temporada anterior, según datos de la Sociedad General de Autores de España (SGAE), difundidos por el Centro de Documentación Teatral (CDT). Según una traducción de la recaudación a un posible número de espectadores, éstos aumentan de 1.947.250, en la temporada 1983-1984, a más de 2.572.000 en la temporada 1984-1985. Para el CDT, esos 600.000 espectadores más suponen un incremento del 32% respecto a la temporada anterior.

Los datos que aporta el Centro de Documentación Teatral -dependiente del Instituto Nacional de Artes Escénicas y de la Música, del Ministerio de Cultura- en su revista El Público, provienen de la contabilidad de la Sociedad General de Autores de España (SGAE) hecha diariamente en los diferentes teatros madrileños.En Madrid, estos datos sobre la asistencia de espectadores se controlan en su totalidad, lo que no ocurre aún en otros puntos de España, donde los recaudadores de la SGAE no contabilizan, por ejemplo, las representaciones que se ofrecen gratuitamente. No obstante, según declaró a este periódico el director de El Público, Moisés Pérez Coterillo, estos datos no son definitivos, pues no pueden sustituir a un control de taquilla; éste no existe para el teatro en España, (aunque sí el de recaudación) y sólo el control de taquilla informaría del incremento real de espectadores de una temporada a otra.

Los datos de recaudación confirman hechos tan evidentes como el éxito de Lina Morgan o el auge de espectadores en teatros de gestión pública, pero también desmienten ciertos prejuicios según los cuales el teatro está muerto. El hecho de que algunos espectáculos vayan mal no significa que existan otros ampliamente aceptados por un importante espectro de público, y que teatros que no levantan cabeza y popularmente se conocen como gafados conviven en una misma ciudad con otros que muchas tardes cuelgan el deseado cartel de No hay entradas.

Los 'chivatos'

La información oficiosa que proporciona El Público, con datos de la SGAE que no son oficiales, ya ha sido realizada por otros medios, como el Anuario editado por EL PAÍS.Estos datos, conocidos con el nombre de chivatos, se recogen en unas hojas diarias en las que se reflejan las recaudaciones y rendimiento de todos y cada uno de los teatros de Madrid, y son recogidos periódicamente por El Público.

Los responsables de la revista consideran que, tras hacer esta labor durante cuatro temporadas, limitándose a traducir estos datos a un lenguaje más comprensivo, han llegado a ciertas conclusiones: "Hay un aforo de teatros que no viene en los chivatos y que nosotros incluimos, pero los datos básicos son, por ejemplo, el número de funciones semanales. Hemos clasificado también los teatros en distintos grupos, de acuerdo con el sistema de producción: separamos los teatros de gestión pública que pertenecen a la Administración central de los que pertenecen al municipio, y en los teatros de empresa privada hacemos una diferenciación entre los de gran formato, revista y musical, y otros de comedia, drama o vodevil, con el fin de comparar aquello que es comparable. En el apartado de las salas independientes, hemos incluido aquellos espectáculos que están programados en festivales y manifestaciones similares".

En ese sector mixto en el que se han incluido todos aquellos teatros que no son de gestión pública están incluidas tanto las salas estrictamente privadas como las concertadas con el Ministerio de Cultura, acogidas a las ayudas que proporciona el Instituto de Artes Escénicas y de la Música. Debido a ellas, se ha dado el curioso fenómeno de un descenso en el precio medio de la butaca, que ha pasado de 808 pesetas en la temporada 1983-1984 a 753 pesetas en la última temporada. Estos chivatos aportan datos aproximativos, ya que en los rendimientos de cuentas de los teatros no se incluyen las entradas con descuento, los abonos a ciclos, o aquellos espectadores invitados.

En contra de lo que venía sospechando el Centro de Documentación Teatral, según los datos que manejaba en años anteriores, no sólo han aumentado los espectadores en teatros públicos, sino que los teatros de empresa privada han tenido una mayor recuperación en ingresos económicos, lo que se traduce en un incremento de espectadores.

El director de El Público opina: "Es muy difícil ofrecer datos fidedignos; nosotros contamos con el aforo de los teatros y una media de lo que es el coste de butaca y lo que pueden costar otras localidades que son más baratas que la butaca; con esto hemos hecho un cálculo aproximativo. Éstos no son datos rigurosos, pero sí entendemos que aproximadamente hay unos 600.000 espectadores más. Los datos que manejamos no son oficiales, y al traducir las cifras económicas en espectadores hay que hacerlo con todas las reservas".