El aborto legal
DIARIO 16
Diario 16 exponía ayer en sus páginas el caso de una mujer, víctima del SIDA por su drogradicción, que está encontrando incontables dificultades para abortar dentro del plazo legal previsto de 10 semanas.Obviamente, este caso no está aislado. Como denunciaba tam,bién ayer el Partido Reformista, no existe en estos momentos información, programación ni sensibilización al respecto de la realización clínica del aborto según la normativa vigente. La mujer que, cumpliendo con los requisitos exigibles, desea acogerse a lo prescrito en la ley 9/1985 que despenaliza en ciertos casos la interrupción voluntaria del embarazo, se encueritra con una pared infranqueable frente a sí. Los centros del Insalud remiten, por regla general, a las pacientes a los Centros Municipales de Salud, por temor a tropezar con la objeción de conciencia de sus médicos... Y estos centros no tienen capacidad ni dotación para orientar convenientemente y con eficacia a las mujeres que recaban ayuda. Comienza entonces una carrera surrealista de trabas, silencios, obstáculos, inconvenientes y problemas de todo tipo, que, con suerte, termina en una intervención quirúrgica realizada con sordidez y ocultación en algún remoto hospital.
La del aborto es una delicada cuestión que afecta a las conciencias de cada cual. Pero, al margen de la consideración moral que cada uno tenga del asunto, lo cierto es que el ciudadano está en su derecho de hacer uso de las leyes legítimas promulgadas'por el Parlamento. En consecuencia, la Administración y, en concreto, el Insalud, tiene la obligación imperativa de facilitar el modo de abortar a quien lo solicite. Y, para ello, no sólo basta con reunir los equipos médicos adecuados entre los facultativos que no hayan manifestado objeción de conciencia: hace falta, asimismo, implantar un fluido sistema de orientación e información, que hoy día no existe
1 de noviembre
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