Bélgica y Holanda reclaman una reunón de la OTAN previa a la 'cumbre' de Ginebra

Bélgica y Holanda, molestas por no haber sido invitadas por el presidente Ronald Reagan a las conversaciones de los siete grandes preparatorias de su reunión con Mijail Gorbachov, reclamaron ayer una reunión extraordinaria de los ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN. Un portavoz del Ministerio belga de Exteriores dijo que "Bélgica cree que es útil consultar con Japón, pero considera que la OTAN es el marco adecuado para examinar las relaciones Este-Oeste".El jefe de la diplomacia belga, Leo Tindemans, ha pedido,en carta enviada a su homólogo norteamericano, George Shultz, que la OTAN celebre una reunión en Nueva York hacia el 24 de octubre. Los términos de la misiva fueron acordados con el ministro holandés de Asuntos Exteriores, Hans van den Broek.

Fuentes de la Administración de Ronald Reagan han mostrado dudas sobre la posibilidad de que se celebre tal encuentro, aunque han hecho saber que Washington intentará encontrar vías para complacer a quienes se han quedado fuera de la cumbre convocada por el presidente norteamericano.

La Administración de Reagan se siente incómóda por esta inesperada reclamación y por la negativa del presidente francés a acudir a la cita, pero a pesar de ello, la Casa Blanca mantiene la convocatoria para el 24 de octubre.

En París, portavoces oficiales subrayaron ayer la coherencia de la negativa de François Mitterrand a asistir a esa cumbre, indica Soledad Gallego-Díaz. Mitterrand fue el único aliado que se negó en la pasada cumbre de Bonn a respaldar la Iniciativa de Defensa Estratégica, aun corriendo el riesgo, como así sucedió, de encontrarse solo frente a Washington.

No existe ningún argumento nuevo, señalaron dichas fuentes, que haya hecho cambiar de criterio al presidente. Acudir a Nueva York sólo hubiera servido para acentuar las diferencias, porque una vez más Mítterrand se habría visto obligado a contradecir a sus homólogos. La postura de París, insistieron dichos portavoces, es meridianamente clara: Francia apoya a sus aliados ya EE UU y no hará nada que entorpezca las conversaciones de Reagan y Gorbachov, pero se mantendrá al margen de todo lo relativo a la guerra de las galaxias.