Hacia una nueva generación de satélites de comunicación
Intelsat y Eutelsat preparan el lanzamiento de satélites de mucha mayor capacidad de transmisión
Se equivocan quienes creen que los últimos fracasos en el lanzamiento al espacio de satélites de comunicación van a paralizar la carrera de las comunicaciones espaciales. Lejos de retirarse del escenario tecnológico o de reducir sus programas, dos de las organizaciones internacionales más relevantes en la carrera de los satélites de comunicaciones, Intelsat y Eutelsat, se disponen a poner en órbita nuevos y sofisticados artificios para potenciar las telecomunicaciones y hacer llegar de una parte, a otra del mundo más mensajes y de una forma más rápida.
La Organización internacional de Satélites de Telecomunicación (Intelsat) ha manifestado recientemente, a traves de su director general, Richard E. Colino, "su confianza" de que el fracaso de la lanzadera espacial Ariane en los primeros días de este mes no influirá en los planes de esta organización (la más poderosa e influyente, ya que en ella participan 109 países).El Ariane tuvo que ser destruido por los técnicos, a los pocos minutos de haber sido lanzado, debido a una avería. Con este cohete se perdieron también dos satélites, uno de ellos, de la Organización Europea de Satélites de Telecomunicación (Eutelsat). En este último, España se iba a beneficiar, por medio de la Compañía Telefónica Nacional, de uno de sus canales o transponedores para servicios de televisión.
El Intelsat tiene previsto, según ha manifestado su director general, utilizar de nuevo la lanzadera Ariane para poner en órbita esta vez nuevos satélites de la serie Intelsat VI, cuya principal característica es que multiplican la capacidad de circuitos y canales. No obstante, los dos primeros satélites de esta serie, que serán los más poderosos del mundo, serán lanzados por medio del Discovery norteamericano.
En la actualidad, Intelsat tiene en órbita 15 satélites que cubren las zonas del Atlántico, el océano Indico y el Pacífico. A través de 650 estaciones terrenas une entre sí instantáneamente a más de 165 países. A través de sus 80.000 circuitos ofrece todo tipo de servicios de comunicación, entre los que destacan los de televisión. Cada cinco minutos se transmite por Intelsat en el mundo un programa de televisión en directo.
Mayores dimensiones y mayor capacidad
La nueva generación de Intelsat VI se diferencia de los anteriores por tener mayores dimensiones (3,6 por 6,4 metros, es decir, sensiblemente superior a los anteriores); por tener más años de vida (10 años ahora, cuando la media de los actuales satélites es de, 7 años) y por ampliar considerablemente la capacidad de circuitos (36.000 nuevos circuitos). Estos nuevos satélites ofrecerán también la posibilidad de explotar tres nuevos canales de televisión mundial.En cuanto a los servicios que van a prestar estos nuevos satélites seguirán siendo los más importantes: la red telefónica internacional, los programas de televisión internacional, los servicios domésticos de telecomunicación, los servicios de negocios, las videoconferencias y teleconferencias y los servicios de transmisiones de datos.
Eutelsat, por su parte, tampoco desiste de seguir adelante en su programa, a pesar de haber perdido recientemente un satélite. Según Martine Papo, una de las principales directivas de esta organización, la consecuencia del fracaso del Ariane es que se retrasará la puesta en órbita del próximo satélite, pero en ningún caso se abandonarán los planes de expansión. Entre estos planes figura la adquisición de una segunda generación de satélites de comunicación.
En la actualidad, Eutelsat, integrado por 20 administraciones de la zona, cuenta con dos satélites operativos y tiene previsto el lanzamiento para los próximos años de otros cinco satélites. Estos nuevos, satélites tendrán una capacidad de 24.000 canales telefónicos y dos canales para televisión.
Aunque el sistema europeo de telecomunicaciones por satélite es más modesto que el de Intelsat, el primero tiene la ventaja de que es utilizado al completo y, además, está conectado directamente a los programas de digitalización, fibra óptica y redes de televisión por cable que existen en estos momentos en Europa.
