Pocos investigadores en España

El láser se sitúa en un campo de alta tecnología, y su investigación todavía resulta muy cara, incluso para países que, como Estados Unidos, dedican 11.500 investigadores al estudio de esta nueva tecnología. La situación global en España puede considerarse como muy pobre (apenas pasan del centenar de investigadores) y en ningún mdo comparable con el nivel norteamericano, y ni siquiera con el europeo, según han expresado muchos de los profesores participantes en este curso, quienes han corroborado los informes evaluadores previos que ha hecho el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

Falta en esta materia en España tanto el potencial científico como el empresarial, y las escasas partidas presupuestarias oficiales que se destinan para este tema van a parar casi todas al sector de defensa. Es precisamente en este último sector en el que la división de electrónica e informática del Instituto Nacional de Industria (INI), a través de las empresas EISA y ENOSA, construye dispositivos para aplicaciones en telemetría y rastreo con equipos portátiles con licencias de las empresas norteamericanas Hughes Aircraft y Thomson CSR.

Estos dispositivos están siendo instalados en los carros de combate M48-A5-. ENOSA fabrica también un modelo de visor de infrarrojos y un sistema láser para artillería, dentro del plan de modernización del carro 40/70. Otra empresa privada que trabaja en el área de defensa, CECSA, ha producido simuladores de tiro de carros de combate con láser de diodo de semiconductores y ha participado también en estudios y ensayos sobre rastreo láser de misiles.

Probablemente la utilización más difundida del láser en España sea la de aplicaciones médicas. La mayor parte de estas experiencias se realizó en la medicina privada con láser de baja potencia. Básicamente se aplica en terapias dermatológicas, acupuntura, cirugía plástica, oftalmología y tratamientos de rehabilitación y de enfermedades degenerativas.

En el campo industrial existe un interés disperso entre varias aplicaciones. Uno de los proyectos de mayor importancia es el promovido por la Asociación de la Industria Navarra, con el apoyo del Gobierno autónomo navarro. El Ejecutivo navarro destinó en su día 140 millones de pesetas para la instalación de un centro de experimentación y desarrollo de las aplicaciones industriales del láser de alta potencia.

El proyecto está integrado, de acuerdo con las explicaciones dadas por José María Zabalza, responsable de investigación de la Consejería de Industria del Gobierno de Navarra, por tres tipos diferentes de láser para tratamiento superficial de materiales, soldadura, corte, corte taladrado y mecanizado de piezas pequeñas con precisión.

Por lo demás, en Pamplona ya existe una instalación en funcionamiento con un láser de CO2 de 600 vatios para grabado de rodillos de goma para impresión de papel. Existe también otra en Valencia, con una instalación análoga para corte de espejos de automóviles.

Por otra parte, el Gobierno regional de la Comunidad de Madrid estudia la adquisición de varias unidades de equipo de láser para promover la mejora de las explotaciones de las vegas del Henares y del Jarama. Esta nueva técnica permitirá conseguir una uniformidad casi total en las parcelas, con el consiguiente ahorro de agua.

Respecto a la fabricación de fuentes láser, debe recogerse el proyecto que existe en Barcelona de láser de CO2 de 50 vatios para uso médico. En Madrid, la empresa Induyco trabaja con asistencia de grupos del CSIC y de la Universidad en el desarrollo de un láser de CO2 de baja potencia aplicable al corte de tejidos. La utilización de métodos de diseño por ordenador y la automatización de este proceso pueden dar resultados espectaculares.

El campo de las comunicaciones

En el campo de las comunicaciones, tan solo existen algunas instalaciones realizadas por Standard Eléctrica y por Telefónica, que incluyen redes de transmisión de datos por fibra óptica y láser de semiconductores con componentes importados. En este terreno de las comunicaciones son de destacar la transmisión de planchas de periódicos por el sistema Laserite. Este sistema es utilizado por la empresa PRISA, editora del periódico EL PAIS.

El sector de la investigación en láser se concentra principalmente en el CSIC y en algunas universidades. El primer organismo ha lanzado recientemente un programa movilizador de láser y sus aplicaciones que tiene como primer objetivo coordinar los esfuerzos en este tema, que se considera como prioritario. Dentro de este programa ya han sido aprobados cuatro proyectos, dos para el Instituto de Estructura de la Materia, uno para el Instituto de Química Física Rocasolano y otro para el Instituto de óptica Daza de Valdés.

Además de otros grupos relacionados con la investigación de láser, como son el Instituto de óptica, el Instituto de Estructura de la Materia, el Instituto de Física del Estado Sólido y la división de Física de la universidad Autónoma de Madrid, Instituto de Geología, CENIM e Instituto de Cerámica y Vidrio, sobresale la investigación universitaria, que tiene 30 grupos de diversos departamentos de distintas universidades españolas investigando en estos momentos sobre alguno de los múltiples aspectos del láser.