El cáncer del espionaje
El reciente descubrimiento de Hans Joachim Tiedge y otros espías del Gobierno alemán, y el de dos espías soviéticos en EE UU, John Walker en la Marina y Richard Miller en el FBI, son síntomas de un cáncer en ambos países.El cáncer lo produce la Unión Soviética, y es nutrido por la estupidez y la corrupción de instituciones políticas de Alemania Occidental y de Estados Unidos. Si aumenta la malignidad del cáncer del espionaje, los dos países no podrán controlarlo. E1 récord de los últimos 40 años no es bueno. (...)
Una de las formas de contrarrestar el espionaje es la de reducir las embajadas de la Unión Soviética y de los países satélites, los consulados y otras misiones. (...)
La mejor forma de defensa es la ofensiva, reclutando agentes capaces para Estados Unidos, Alemania Occidental y otros países occidentales. (...)
, 2 de septiembre
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