El Gobierno endurecerá la política de ajuste económico durante 1986
El Gobierno ha decidido profundizar en la política de ajuste económico y de rigor, con unos Presupuestos del Estado para 1986 fuertemente restrictivos en materia de déficit público. El Consejo de Ministros de hoy decidirá la cifra final de déficit admisible y, a partir de ella, construirá hacia arriba el instrumento básico de la política económica del país. La cifra test de subidas salariales será cercana al 6,5%. Por otra parte, la marcha de la economía conoce dos signos positivos: la inversión crecerá este año un 4%, el porcertaje más alto desde el inicio de la transición, hace una década, y el paro registrado descendió en julio por cuarto mes consecutivo.
El ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, ha convencido al presidente de Gobierno, Felipe González, de que es imprescindible continuar en la misma línea de política económica que defendió su predecesor, Miguel Boyer, incluso acentuándola. De esta idea participa prácticamente todo el Gabinete. El director general del Banco de España, Luis Ángel Rojo, uno de los consejeros áulicos de los responsables de la política económica, repitió ayer el mensaje: es imprescindible endurecer la política gradual de ajuste practicada por el Gobierno socialista para salir de la crisis. Este endurecimiento es tan necesario, que ha de hacerse con o sin el consenso social.Así, el Consejo de Ministros de hoy dará vía libre a la cifra de déficit público a prever para 1986, que será lo más restrictiva posible. A partir de este porcentaje se construirá hacia arriba todo el presupuesto y discutirán los capítulos y las diferentes partidas los distintos departamentos ministeriales. Pero el objetivo será rígido y prioritario. El equipo directivo de Economía y Hacienda (secretarios de Estado, subsecretarios y secretarios generales) se reunió durante toda la tarde de ayer con Carlos Solchaga para que el Gabinete de hoy ericuentre masticado el objetivo básico de su política: contener el déficit, cáncer estructural de la economía española.
Palalelamente, la coyuntura conoce algunos síntomas acordes con la política econórnica seguida: la inversión de 1985, crecerá un 4%, el porcentaje más alto desde el comienzo de la transición política, a mediados de la pasada década. Este incremento de la inversión facilitará, el logro del objetivo del Gobierno de al canzar,un crecimiento general de la economía próximo al 2%. (La estimación oficial es del 1,9%).
Por otra parte, el paro registrado disminuyó por cuarto mes consecutivo durante el mes de julio en 25.000 personas. La cifra global de parados es la menor desde el mes de septiembre de 1984.
El Gobierno espera conocer hoy o mañana el índice de precios al consumo de julio, confiando en que su porcentaje sea muy positivo, bastante por debajo del 1% (frente al 1,5% del año pasado), lo que que hace posible que la inflación no sobrepase el 7,9% a final de año.
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