AP amenaza con retirarse de las Cortes porque el informe de TVE sobre Fraga rompe "el pacto constitucional"

La interpelación, ayer en el Congreso, del Grupo Popular al Gobierno sobre el informe emitido por televisión el pasado día 19, acerca de la gestión de Manuel Fraga como ministro de la Gobernación, desató un cúmulo de especulaciones de gran trascendencia avaladas por una frase del líder de la oposición: "Cosas como éstas son las que constituyen la ruptura del pacto constitucional". Dirigentes del Grupo Popular aseguran que existe la posibilidad de abandonar las Cortes, no presentarse a las elecciones legislativas y, en suma, no participar en las instituciones democráticas, por considerar que el PSOE no respeta el pluralismo político.

Sobre el "pacto constitucional", el presidente del Gobierno, Felipe González, comentó anoche: "Deseo que las cosas se calmen, tener un diálogo constructivo y no crispar más las cosas".El líder de la oposición conservadora, Manuel Fraga, en una cena mantenida la noche del martes con un grupo de periodistas, había afirmado, en el contexto de la negativa de televisión de emitir el vídeo de rectificación elaborado por AP, que hechos como éste rompían el pacto constitucional, y que AP actuaría en consecuencia. Un periodista le señaló que si en esa actitud entraría retirarse de las Cortes, a lo que Fraga contestó, según los presentes, que esa no era una de las "máximas" medidas que podían tomar. "Estamos dispuestos a llegar hasta el final", dijo Fraga, que tampoco descartó, a sugerencias de otro informador, el no concurrir a las elecciones. Estas afirmaciones de Fraga fueron transcritas ayer a este periódico por el jefe de gabinete de imagen de AP, presente en esa cena. La apelación a la ruptura del pacto constitucional fue repetida ayer por Fraga al finalizar la interpelación.

Dirigentes del grupo mayoritario de la oposición aseguraron ayer que esas medidas eran posibles, así como la petición de que se traslade a España, en calidad de observador, una delegación del Parlamento Europeo. "Todo ello mientras no se dé una respuesta satisfactoria a la oposición, se la margine en los medios públicos y no se rectifique", afirmó un miembro del Comité Ejecutivo de AP, que con la caída de "alguna cabeza" de televisión se daría por satisfecho inicialmente. Mucho se habló ayer de este pacto constitucional que encierra el olvido del pasado de todos los que intervinieron en la vida política tras la muerte del anterior jefe de Estado y estuvieron dispuestos a elaborar una Constitución democrática.

En lo que fue ayer estrictamente la interpelación del Grupo Popular, las apelaciones al pasado fueron continuas, tanto por el diputado del Grupo Popular Juan Ramón Calero como por el ministro de la Presidencia, Javier Moscoso, tras la cual el propio Fraga anunció la presentación de una moción y calificó de "ejercicio de cinismo" la respuesta del ministro Moscoso.

El ponente popular Juan Ramón Jiménez Calero no se refirió apenas a la cuestión que había provocado esta interpelación, es decir, el informe de TVE sobre la gestión de Fraga en el Ministerio de la Gobernación y la negativa de televisión a emitir el vídeo de rectificación elaborado en AP. Televisión se limitó a leer el texto remitido por AP, sin imágenes.

Calero advirtió que no iba a defender a Manuel Fraga. "No voy a defender el prestigio de un hombre que ha sido brutalmente agredido por televisión con el claro propósito de empañar su limpia y honrada trayectoria política", dijo Calero. "Su honor, su patriotismo y su prestigio están tan consolidados que por muchas calumnias, injurias y mentiras de todos los Calviños que en el mundo han sido no oscurecerán la imagen de Manuel Fraga", añadió el citado portavoz popular, quien dijo hablar en nombre del pueblo español. A juicio de este diputado, este pueblo está "hastiado e indignado de tanta manipulación, sectarismo y mentiras de los medios públicos de comunicación". En su interpretación del sentir de la sociedad española, Calero afirmó que el país está indignado de que la televisión no sea del pueblo, "sino de Calviño, o de Alfonso Guerra, pero, en cualquier caso, al servicio exclusivo de los intereses electorales de Felipe González", subrayó Calero.

La reconciliación nacional

El portavoz del Grupo Popular acusó al Gobierno de no respetar el sentido más profundo de lo que significa la democracia y de no contribuir a la "reconciliación nacional", con referencias a las dos Españas. Para este diputado, sin pluralismo social e informativo la democracia se convierte en una estafa".El ministro de la Presidencia, Javier Moscoso, reprochó al Grupo Popular haber caído en una profunda contradicción, cual era pedir al Gobierno que no intervenga en televisión, al tiempo que le insta a que actúe y cese a los responsables de los informativos del ente público. "Al Grupo Popular le ha traicionado el subconsciente; esta interpelación hubiera sido oportuna si rigiera la ley de Prensa e Imprenta de 1966, la llamada ley Fraga, que obligaba a los periódicos a insertar las noticias que remitiera la Administración", dijo Moscoso, para quien la simple solicitud de sancionar a los profesionales de televisión "es atentar contra su libertad". En las réplicas y contrarréplicas vinieron las alusiones al pasado. Cuando el diputado Calero afirmó que siempre había sido fiel a Manuel Fraga, el ministro le preguntó "al Fraga de qué año era fiel". Aprovechó Calero para recordar al ministro su pasado en UCD y su puesto de fiscal en tiempos de la dictadura.