López Cobos: "Las negociaciones con Cultura atraviesan un momento delicado"

Antes de fin de año se sabrá si Jesús López Cobos continuará o no como director de la Orquesta Nacional de España (ONE), según dijo a este periódico el interesado, desde Berlín, donde reside cinco meses al año. "Las negociaciones con Cultura atraviesan un momento delicado", comentó. El director anunció el viernes su incorporación como director, a partir de 1987, a la Orquesta de Cincinatti.

El anuncio se hizo mediante un vídeo grabado en Berlín y emitido por una cadena de televisión norteamericana. Respecto a las negociaciones para su continuación como director de la ONE "en el Ministerio de Cultura están haciendo lo posible", comentó el director. El contrato de López Cobos con la Orquesta Nacional termina el 31 de diciembre de 1986, pero ha de revisarse al final de este año. Para prorrogarlo, el director pide que se cumpla un plan de mejora de los recursos de la orquesta, establecido tras su incorporacion, y que prevé sólidos aumentos salariales para los músicos. Durante el último año y medio, explicó el director, "he estado no sólo dirigiendo, sino reuniéndome en despachos. No quiero que eso continúe"."En España no se comprende que un músico de alta cualificación sea pagado como un profesor de universidad", explica López Cobos, pero en países como la República Federal de Alemania lo está. También en España se suele decir que los músicos no debieran ser funcionarios, y se cita como ejemplo a los músicos británicos. "Lo que no se dice es que los músicos ingleses quieren serlo. Los profesores de la Orquesta Filarmónica de Berlín

son funcionarios, y constituyen la mejor orquesta del mundo".

Viajar menos

Los bajos sueldos de los músicos en España constituyen la base del círculo vicioso que condena a las orquestas españolas a una permanente provisionalidad. "Para cubrir algunas de las 27 plazas libres en la Orquesta Nacional -30 al final del año- he escuchado a algunos músicos en el extranjero, pero estamos a expensas de poder ofrecerles unos sueldos dignos", explica López Cobos. "En la Orquesta Nacional hemos perdido a un primer cello y a un primer trombón porque en otras orquestas españolas les pagaban mejor. Si ni siquiera puedo retener a músicos dentro de España, la situación es insostenible".Si se confirmara la permanencia de López Cobos en España pasaría a dirigir tres Orquestas: la Nacional de España, la de Cincinatti (el contrato es hasta 1991) y la de la ópera de Berlín, con un contrato que termina en 1990. En contra de lo que pueda parecer, dice LópezCobos, este triple frente redundará en una mayor concentración, ya que sólo se consagrará a estas tres formaciones, y no como ahora, que dirige varias más en conciertos eventuales a lo largo el año.

En Cincinatti comenzará con una dedicación de tres semanas al año, en 1986, y aumentará hasta tres meses, no continuos, en 1991. De momento su base seguirá siendo Berlín, donde reside junto a su segunda esposa y su hijo de cinco años. Ausente de España desde 1966, al director le gustaría, si es posible, residir en el futuro en Madrid, ciudad en la que vive el hijo de su primer matrimonio, de 17 años.

López Cobos está contento con su proyecto de dirigir la orquesta de Cincinatti, "una de las 10 primeras orquestas de Estados Unidos".

El plan económico diseñado cuando López Cobos se hizo cargo de la dirección de la ONE suponía una tajante revisión de los sueldos, que sólo se ha cumplido a medias: los profesores han pasado de cobrar unas 110.000 pesetas mensuales a unas 150.000 comó máximo. López Cobos cobra 300.000 pesetas netas por cada concierto que dirige. La orquesta ofrece unos 80 o 90 al año, pocos a juicio del director, pero el presupuesto no da para más.