Propuestas para una 'Europa de los ciudadanos'
A. O., Una Academia Europea de Ciencia, Tecnología y Arte, que otorgará algo así como los premios Nobel de la CEE, es una de las numerosas propuestas contenidas en el segundo informe sobre la Europa de los ciudadanos -la Europa de las pequeñas cosas-, presentado el pasado miércoles en Luxemburgo por el presidente del comité ad hoc que lo ha redactado, el italiano Pietro Adonino, y que será debatido en la cumbre europea de Milán.
El comité presentó un primer informe -que versaba especialmente sobre las facilidades del cruce de fronteras en la CEE-, y que fue aprobado por la cumbre europea de Bruselas el pasado mes de marzo. Pero a la hora de llevarlo a la práctica, en el Consejo de Ministros de la CEE han surgido vetos y oposiciones. Así, Irlanda y Dinamarca se han negado a aceptar los nuevos límites de franquicia fiscal para los viajeros (pues muchos irlandeses compran en Irlanda del Norte, y muchos daneses, en la RFA, donde el IVA es más bajo).
De ahí que Adonino se plantee ahora preguntas sobre el futuro del nuevo informe. El comisario encargado de este asunto, Carlo Ripa di Meana, quiere que Milán "aborde la violación flagrante por parte del Consejo de Ministros" del acuerdo de la cumbre de Bruselas y sostiene, en consecuencia, que es urgente modificar el sistema de decisiones en la CEE.
No obstante, ahí está ahora el segundo informe, que contiene propuestas de medidas que se podrían tomar en un breve plazo, y otras a más largo plazo.
En el terreno institucional, el informe sugiere que se estudie la posibilidad de que el Parlamento Europeo cree la figura de un ombudsman para canalizar y defender las quejas de los ciudadanos de la CEE. En cuanto a las elecciones al Parlamento Europeo, debe regir un sistema electoral uniforme en toda la CEE y que todos los ciudadanos europeos puedan votar, ya sea en su país de origen o en su país de residencia.Y sugiere que para las elecciones locales puedan votar y ser elegibles todos los ciudadanos comunitarios, cualquiera que sea su lugar de residencia en la CEE.
Propone también que se adopte como emblema y como bandera de la CEE una similar a la del Consejo de Europa, con una E dorada rodeada de 12 estrellas sobre fondo azul. Y como himno de la Comunidad, el de la alegría de la Novena Sinfonía de Beethoven.
Entre otras medidas, en el terreno de la educación se propone también el fomentar el intercambio de grupos de jóvenes; que el conocimiento práctico de dos idiomas extranjeros sea obligatorio al final de la educación obligatoria; el fomento de la cooperación entre universidades, y el reconocimiento de estudios parciales realizados en otros países a la hora de otorgar los diplomas o proseguir los estudios (es decir, un sistema de créditos, como en EE UU, transferibles en toda la Comunidad).
En cuanto al terreno sanitario, sugiere la creación de una carta sanitaria de emergencia, personal y voluntaria con algunos datos básicos, y el acceso al tratamiento médico a través de toda la Comunidad para todos los ciudadanos. También insta a una acción común en la lucha contra la drogadicción. El informe contiene también sugerencias para el fomento de la cooperación en los deportes -creando equipos comunitarios-, e insta a una mayor colaboración entre los países miembros para prevenir y luchar contra la violencia en los estadios.
