La CEOE califica de parciales e ineficaces las medidas del Gobierno
FÉLIX MONTEIRA, La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) califica las medidas de política económica aprobadas recientemente por el Consejo de Ministros de ineficaces, "porque se trata de un parcheo que no entra en la solución de ninguno de los verdaderos problemas estructurales que tiene planteados la economía española". En opinión del presidente de la patronal, José María Cuevas, "este Gobierno está perdiendo credibilidad permanentemente
Algunas de las decisiones del Gobierno, como la liberalización de alquileres, han sido calificadas de positivas, pero en opinión de José María Cuevas se, trata de una medida insuficiente. "Sigue sin hacerse nada", declaró a este periódico, "para corregir el déficit público, para sanear la situación financiera de la Seguridad Social, para resolver el problema de capitalización de las empresas, y tampoco para adecuar el marco de las relaciones laborales a los países de la CEE".
Los representantes empresariales opinan que vamos hacia una espiral de devaluación porque no se quiere modificar nada. Hasta el momento el Gobierno sólo ha recortado los gastos de inversión, cuando es necesario reactivar la demanda interna, porque el impulso exterior del pasado año no podrá repetirse.
Con respecto al proyecto de ley para retormar el sistema de pensiones futuras de la Seguridad Social, los representantes de la CEOE manifestaron que su remisión a las Cortes se debe a un intento por parte del Ejecutivo de eludir su responsabilidad. "A veces pienso", añadió Cuevas, "que lo que se pretende es hacer saltar por los aires el Acuerdo Económico y Social (AES) para no tener que asumir compromisos. En la mesa de la comisión creada al efecto no se ha querido discutir en serio el tema ni abordar la reforma de otro tipo de prestaciones".
La organización patronal expresó su disposición a asumir compromisos conjuntos sobre el coste de la ley de Sanidad Pública, la definición de las nuevas pensiones y los sistemas complementarios, así como los regímenes especiales y el sistema de financiación de la Seguridad Social. La CEOE considera que el recorte presupuestario que se va a conseguir con el nuevo sistema de pensiones es irrelevante, sobre todo cuando se desconoce cómo se va a asegurar la financiación del sistema. Además, calificó de paradójico que el Gobierno no esté dispuesto a acometer la mejora de la gestión. La aportación del Estado a la Seguridad Social, fijada para el próximo año en 890.000 millones de pesetas, representa poco más del 22% del total del presupuesto, "muy lejos del 30% prometido".
Según datos de la patronal, los gastos de administración general de la Seguridad Social se han incrementado en un 38,21% en los últimos dos años (cifras de 1985 referidas al ejercicio de 1983), mientras que los servicios sociales prestados han crecido en el mismo período un 23,57%. En el Insalud los gastos totales han aumentado en el bienio en un 15,03%, pero los gastos en servicios generales ("básicamente administrativos") lo han hecho en un 72,77%.
La nueva ley de Sanidad Pública, que prevé un aumento de la población sanitaria a la que extiende su cobertura, así como una mejora de las prestaciones, establece un aumento de las aportaciones públicas de 105.000 millones de pesetas, sin que el Estado se comprometa a asumir este gasto añadido, que más bien parece que corresponderá a la Seguridad Social, tal como establece la disposición adicional del texto. También se desconoce el gasto total (superior a 1,2 billones de pesetas), y "el Gobierno no ha querido facilitar ninguna memoria económica a pesar de habérselo requerido insistentemente".
Dos tipos de empresas
Las críticas de la CEOE se extienden al sistema de bonificaciones en las cuotas a la Seguridad Social, sobre todo tras el anuncio del Gobierno de reducir a la mitad la aportación empresarial para la creación de empleos fijos.
Según José María Cuevas "se abre un sistema incontrolable desde el punto de vista de la competitividad empresarial". La medida anunciada supondrá la creación de dos tipos de empresa dentro de la misma empresa, de dos clases de trabajadores con costes salariales bien diferenciados. "Es un sistema que", en palabras de José Luis Cerón, responsable de la comisión de economía de la patronal, "viene muy bien a las empresas extranjera que se instalan de nuevo en nuestro país".
El presidente de la CEOE define la situación como si el Gobierno estuviera insinuando decir a los "empresarios que tienen 50 o 100 trabajadores: cierren ustedes su empresa y miren si la pueden abrir enfrente con las nuevas condiciones". En su opinión, con estas actuaciones, el Gobierno puede generar "un vendaval que, al final, termine por arrollarles a ellos también".
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