España, ejemplo para Uruguay.
La presencia en Montevideo del presidente del Gobierno español, Felipe González (derecha), y de su antecesor en la Moncloa, Adolfo Suárez, provocó un entusiasmo generalizado entre los uruguayos, que ven en la transición democrática española un espejo en el que reflejarse para el futuro inmediato. El líder centrista (que aparece firmando autógrafos en el Hogar Español de la capital uruguaya), el dirigente socialista (que en la foto conversa, en el mismo escenario, con un anciano español inválido) y el presidente de Nicaragua, el comandante Daniel Ortega, fueron las estrellas en los actos de toma de posesión del presidente Julio María Sanguinetti, primer jefe de Estado constitucional tras 11 años de dictadura militar en Uruguay. Los políticos españoles tenían previsto volver hoy a Madrid. Los buenos oficios del presidente español, unidos a los de sus colegas argentino y uruguayo, propiciaron un encuentro entre Ortega y George Shultz. La entrevista sirvió para desbloquear la problemática centroamericana y dar un nuevo impulso al proceso pacificador.
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