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Gromiko desea incrementar las relaciones entre España y la URSS sin perjudicar a "terceros países"

El ministro de Asuntos Exteriores soviético, Andrei Gromiko, manifestó ayer sus deseos de incrementar las relaciones de su país con España y, en abierta alusión a Estados Unidos, subrayó sus esperanzas de que estos lazos no perjudiquen a "terceros países". Gromiko hizo estas declaraciones al salir anoche de la entrevista que durante dos horas y media mantuvo con su homólogo español, Fernando Morán, en el despacho de éste en el palacio de Santa Cruz. Al mediodía, poco después de que su avión oficial le trajera de Roma a Madrid, el jefe de la diplomacia soviética conversó, igualmente, durante 40 minutos, con el presidente del Gobierno, Felipe González, y asistió al almuerzo que éste le ofreció en el palacio de la Moncloa.

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Durante las conversaciones celebradas en Madrid en el primer día de su segunda estancia oficial, Gromiko dió un repaso con González y Morán a los problemas internacionales. Iberoamérica, Oriente Próximo, Norte de Africa y relaciones Este-Oeste fueron parte de los asuntos tratados en las conversaciones, según afirmó anoche Fernando Morán.Igualmente, Gromiko conversó con el jefe del Gobierno y con su homólogo español sobre las conversaciones soviético-norteamericanas de Ginebra y, en general, sobre el proceso de desarme. Morán afirmó al final de la entrevista que su impresión es que 1a URS S tiene voluntad de negociar en Ginebra" y que está especialmente preocupada por el problema planteado por el inicio de las investigaciones científicas sobre armas espaciales.

En lo que respecta a la presencia de España en la OTAN, el ministro español de Asuntos Exteriores afirmó que se ha explicado la posición española y que no ha recibido "ninguna presión ni ninguna puntualización por parte soviética". De esta cuestión se habló no sólo durante el encuentro de Gromiko con Morán, sino, también, durante la entrevista con Felipe González.

Gromiko y Morán coincidieron, según afirmó este último, en la necesidad de incrementarlas relaciones comerciales entre ambos países. "Se pueden hacer más cosas y estamos de acuerdo en ello", afirmó el ministro español de Asuntos Exteriores.

Por su parte, a la salida de su reunión con Morán, Gromiko improvisó una declaración a la Prensa en las escalinatas del palacio de Santa Cruz (sede del Ministerio español de Asuntos Exteriores) en las que calificó de "útil" y de "mucho contenido" los encuentros celebrados en el primer día de su estancia en Madrid. "Deseamos seguir desarrollando nuestras relaciones y esperamos que éstas no causen ningún mal a terceros países, si éstos ocupan una posición de paz y de amistad", concluyó el jefe de la diplomacia soviética.

Morán y Gromiko se reunieron durante dos horas y media, acompañados de los embajadores de España en Moscú, José Luis Xifra, y del de la URSS en Madrid, Yuxi Dubinin, siendo auxiliados, además, por dos traductores. Entretanto, la esposa de Gromiko, Lydia, tomaba el té en el palacio de Viana con las esposas de ambos embajadores.

En un principio, se esperaba que el encuentro fuese breve y que ambos ministros pasaran a presidir el inicio de las reuniones entre las delegaciones de ambos países que tenían que celebrarse en el salón de Embajadores del palacio de Santa Cruz. Sin embargo, la conversación se fue animando y hasta hoy no tendrán oportunidad de reunirse en pleno los representantes de las dos naciones.

'Niños de la guerra'

Entre las cuestiones que quedan abiertas para hoy, se encuentra la petición española de que se deje regresar a España a Adolfo González, el único de los niños españoles llegados durante la guerra que tiene dificultades en la URS S para volver a su país de origen. Para tratar de resolver el regreso a España de los aproximadamente 1.100 hispano- soviéticos, el Gobierno español desea también firmar con la URS S un acuerdo sobre Seguridad Social que permita que España y la Unión Soviética se hagan cargo conjuntamente de las pensiones de jubilación una vez que los antiguos niños de la guerra que lo deseen regresen a España, poniendo sus prestaciones de la Seguridad Social al día conforme a la legislación española.

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