Kohl reafirma la inviolabilidad de la frontera polaca

El canciller de la República Federal de Alemania (RFA), el democristiano Helmut Kohl, reafirmó ayer, en su discurso sobre el estado de la nación ante el Bundestag (Parlamento) de Bonn, el respeto por el tratado entre la RFA y Polonia, Ia inviolabilidad de las fronteras y el respeto por la integridad territorial y la soberanía de todos los Estados de Europa en sus actuales fronteras".El tradicional debate parlamentario sobre el estado de la nación sirvió para que el canciller de la RFA precisase posiciones frente a los sectores de su partido, que en los últimos mesies pusieron en tela de juicio la actual frontera occidental de Polonia, formada por la línea Oder-Neisse. Tras dejar discurrir la discusión durante semanas, sin intervenir de forma clara, la situación llegó a hacerse embarazosa para Kohl. Funcionarios de las asociaciones de refugiados y expulsados de los territorios del Este habían llegado a afirmar que Silesia (hoy parte de Polonia) "es propiedad de todos los alemanes".

Helmut Kohl aprovechó el debate de ayer para precisar posiciones frente al sector de su partido que trata de revisar la política del Este y hacer efectivo el cambio en este terreno. Además de la precisión sobre las fronteras polacas, Kohl dejó claro también que la cuestión alemana permanece abierta. Sobre las relaciones interalemanas, Kohl reafirmó las posiciones conocidas del Gobierno de Bonn, y aseguró: "No estamos dispuestos a pagar con el precio de la libertad por la unificación de Alemania".

La posición radicalmente opuesta a la del Gobierno sobre el futuro de Alemania la expuso la portavoz de los verdes, Antje Vollmer. La diputada manifestó que, 40 años después del final de la guerra, ya es hora de firmar un tratado de paz que contenga el reconocimiento de la República Democrática Alernana y su nacionalidad, más las actuales fronteras, "para quitar la base a toda especulación futura", y la retirada de los dos Estados alemanes de sus respectivos bloques militares.