La policía ha recuperado ya todo el botín del asalto al Banesto

La policía completó ayer en San Sebastián la recuperación de la totalidad del botín conseguido el pasado 31 de enero por los asaltantes de las cajas particulares de seguridad de la sucursal del Banco Español de Crédito (Banesto) de la plaza de la Lealtad en Madrid. Las cajas desvalijadas fueron 71, y no 64, como hasta ahora se había informado. Contenían dinero y joyas por un valor estimado en unos 1.200 millones de pesetas. Inspectores de la Policía Judicial de Madrid detuvieron en la ciudad vasca a uno de los participantes en el golpe, que confesó el lugar donde había enterrado una maleta repleta de joyas. El dinero se lo habían repartido los asaltantes en Madrid.

El pasado martes por la mañana los funcionarios policiales capturaron en San Sebastián a José Luis Camacho Morales, de 34 años, nacido en Calzada de Calatrava (Ciudad Real), sin profesión ni domicilio fijos, y a una mujer que le acompañaba y que fue puesta en libertad poco después. Camacho, que no iba arrnado y no opuso resistencia, según informa José Luis Barbería, condujo a los investigadores hasta el grueso del botín del Banesto, que tenía escondido en una maleta que había enterrado en una casa abandonada, en las afueras de la capital donostiarra.Ayer el detenido y la maleta, de grandes dimensiones, viajaron hacia Madrid, custodiados por los inspectores, y llegaron al anochecer a las dependencias policiales de la jefatura superior, en la Puerta del Sol, en Madrid.

La policía esclareció con gran rapidez el caso Banesto porque inspectores de la mencionada brigada tenían conocimiento, por informaciones confidenciales, de que los ahora detenidos estaban preparando "algo muy gordo". Una vez consumado el asalto, centraron sus sospechas en el grupo de ex miembros de la COPEL, la ya desaparecida Coordinadora de Presos en Lucha, cuyas fotografías fueron mostradas a los testigos, que los reconocieron. El titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Madrid confirmó ayer la prisión provisional de cuatro de los presuntos implicados en el asalto -medida que había sido adoptada el lunes por el Juzgado de Instrucción número 5 de Madrid y el Juzgado de Instrucción de Getafe, que en principio también entendieron del caso- y decretó la prisión provisional de otros cinco detenidos, que el martes permanecían en los calabozos de la plaza de Castilla.

El grupo de acusados que desde el lunes permanecen en Carabanchel está formado por Alejandro Echániz, José Ramón Torres, Pedro Camacho y Agustín Moreno. Los encarcelados ayer son Daniel Pont, Francisco Asensio, Pilar Bravo, Amalia García y Amaia Yoldi. Otras tres personas detenidas la pasada semana por la policía en relación a este mismo asunto han sido puestas en libertad.

Nueve encarcelados

El juez, José María Bento Company, justificó el auto de prisión dictado contra Pont y las otras cuatro personas come, una medida cautelar, a la vista de los datos que constan en el sumario y que de uno u otro modo les relacionan con los principales inculpados, los cuatro hombres ingresados en Carabanchel el lunes. El juez añadió que esa medida no supone que se prejuzgue la culpabilidad de los encarcelados. En concreto, el magistrado afirmó que conocía la preocupación de los abogados defensores por la suerte de Daniel Pont, al que la policía en el delito con pruebas, al parecer, no muy sólidas.

Tras confirmar las cuatro prisiones provisionales, decretar cinco nuevas y ordenar la puesta en libertad sin cargos de un hombre cuyo nombre corresponde a las iniciales D. B. R., Bento Company suspendió la tramitación de diligencias por el asunto Banesto y remitió a la sala de lo Penal de la Audiencia Nacional un auto, favorablernente informado por el fiscal del juzgado número 4, en el que manifiesta que, en su opinión, el asunto puede ser competencia de la Audiencia Nacional. El magistrado cita la legislación antiterrorista del 26 de diciembre de 1984 y estirria que por el número de implicados, su organización, el armamento y otros medios utilizados en el asalto, los autores del desvalijamiento de las 71 de seguridad constituyen lo que la ley considera una banda armada.

Echániz y Moreno habían sido arrestados en la misma tarde del jueves en un domicilio del número 15 de la calle Francisco Navacerrada, que la policía considera el piso firanco de la banda. Allí se encentraron 5.000 pesetas, cinco dólares y 50.100 pesos mexicanos. En un posterior registro en el domicilio de Moreno se encontraron 400.000 pesetas, 2.750 dólares y cinco libras.

Camacho fue capturado en la vía pública, en San Sebastián. Se encontraron en su poder 25.000 pesetas, 900 dólares, 680 francos suizos, 10 libras esterlinas y lOmarcos. José Ramón Torres fue localizado en una vivienda de Parla (Madrid), domicilio habitual de Echániz. Intentó huir por los tejados, pero tras una espectacular persecución fue capturado. Se le encontraron 1.745.000 pesetas, 8.490 dólares, 2.600 francos suizos, 52 libras y 100.000 liras.

En cuanto a Daniel Pont, fue arrestado cuando acudía al mencionado piso de Francisco Navacerrada. La policía sólo encontró 102.500 pesetas en su domicilio. Ninguno de los testigos del asalto le reconoció en la rueda de presos celebrada en la Puerta del Sol el pasado sábado.

Los atracadores llegaron al banco en taxi y en un Seat 124, propiedad de uno de ellos, que llevaba placas de matrícula falsas.

El automóvil tenía un scanner o barredor de ondas de radio, que permitía escuchar las comunicaciones internas de la policía. Huyeron en el 124 y en un Peugeot 505 que robaron a punta de pistola en la Plaza de la Lealtad y abandonaron en la calle O'Donnell. Al parecer se dirigieron a casa de Moreno, donde los vecinos les vieron llegar con grandes bolsas. Allí se repartieron el dinero en metálico.

De las joyas se hizo cargo Camacho, que salió inmediatamente hacia el País Vasco con la misión de esconderlas.

La policía asegura que faltan por detener dos presuntos relacionados con el hecho, uno de los cuales se encargó de ocultar las armas. Pese a que Pont no haya sido reconocido, la policía le implica en el hecho y asegura que era él quien esperaba fuera del banco, a bordo del Seat 124 y comunicado por radioteléfono con los que operaban en el interior.

Denuncia de irregularidades

La fiscalía de la Audiencia Nacional deberá ahora informar favorable o desfavorablemente en los próximos cuatro o cinco días el auto enviado por el Juzgado de Instrucción número 4. El hecho de que uno de los implicados haya sido capturado en San Sebastián hace más posible, según medios jurídicos, la asunción por parte de la Audiencia Nacional de este sumario.

Por otra parte, las circunstancias de la detención de los presuntos responsables del espectacular robo han motivado una denuncia, por supuestas irregularidades en la misma, de la defensa de los detenidos, los abogados Fernando Salas, Jaime Sanz de Bremond y José Luis Galán. Según la denuncia de los letrados, que tramita otro juzgado de instrucción, el Colegio de Abogados no tuvo conocimiento en el momento establecido por la ley de la detención de la docena de personas capturadas por la policía en las 24 horas siguientes al suceso.

Los abogados afirman también que se sobrepasaron las 72 horas legales de detención en las dependencias policiales de la Puerta del Sol y añaden que ellos no estuvieron presentes en la rueda de detenidos celebrada en dichas dependencias, en la cual algunos testigos del atraco reconocieron a varios de los inculpados, aunque, al parecer, no a Daniel Pont.

Pont es un líder histórico de la COPEL (Coordinadora de Presos en Lucha) que fue acusado en 1980, por la misma brigada que ha intervenido en el caso Banesto, de dirigir un supuesto grupo armado llamado GAPEL (Grupo Armado de Presos en Lucha), presunto delito del que fue absuelto por un tribunal. Según el abogado Jaime Sanz de Bremond, el ex dirigente de la COPEL está completamente alejado desde hace mucho tiempo de cualquier actividad delictiva.