Una plataforma para lanzar el cine español

El principal problema que afronta el Festival de Cine de San Sebastián es de tipo económico, según declaró ayer Carlos Gortari, director del festival desde 1983 hasta ahora -en el supuesto de que se confirme el nombramiento de Pedro Erquicia- Gortari indicó que hasta ayer no le había sido comunicado su relevo, de cuya posibilidad se había enterado "por amigos". En cualquier caso, "estoy contento con mi labor y con mi sustitución", comentó.En relación con las noticias de su nombramiento, Pedro Erquicia precisó ayer por la tarde que éste aún no se ha producido, y que sólo han tenido lugar "una serie de conversaciones de tipo privado con el alcalde de San Sebastián, Ramón Labayen", y algunos miembros de la fundación de la que depende el festival. En un primer contacto, según Erquicia, manifestó la posibilidad de aceptar el cargo, "supeditada entre otras cosas al conocimiento de lo que realmente quiere dicha fundación que sea el festival".

Parecida pregunta sobre lo que desea la fundación que sea el certamen se hace Carlos Gortari, para quien el festival debe elegir esencialmente entre aspirar a recuperar la categoría A, que perdió en 1979, o especializarse.

Carlos Gortari, que juzgó adecuado el eventual nombramiento de Erquicia, declaró que "es tiempo de comprender que el festival de San Sebastián nos importa a todos. El cine español necesita de esa plataforma de lanzamiento".

El hasta ahora director, también jefe de festivales, certámenes y Eurovisión de TVE, recordó que él aceptó ser director del festival a condición de no tener dedicación. El contrato era por tres años, no le interesaba abandonar su trabajo, y además el sueldo ofrecido era de 1,5 millones de pesetas al año, que consideraba insuficiente. En vista de lo cual durante este tiempo no ha cobrado más que las dietas de viajes.

Indicó que aceptó dirigir el festival "como un director de transición", al sentirse a ello moralmente obligado. Gortari había dejado poco antes la dirección general de Cine, cargo desde el cual aprobó, en 1980, una subvención -la primera de importancia- de 20 millones de pesetas para el certamen de San Sebastián. Coincidió Gortari en que el momento del festival es de importancia, tras el comienzo de acuerdo sobre el abono de cuotas entre los productores españoles y la FIAPF, organismo que concede las categorías de los festivales.

Gortari acepta que el festival necesita un director con dedicación exclusiva y recordó que se ha mantenido con el voluntarismo de mucha gente. Citó el ejemplo del jefe de la sección de Nuevos Realizadores, que compagina su labor con un trabajo en París. El cargo equivalente del festival de Berlín viaja a todos los festivales importantes.