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La embajada española en Bogotá, amenazada tras el arresto en Madrid de dos mafiosos

La policía española está investigando la red de evasión de divisas y el blanqueo de dinero de los mafiosos colombianos detenidos en Madrid el pasado 15 de diciembre, cuyo arresto y posible extradición a Estados Unidos ha provocado amenazas a los diplomáticos españoles y estadounidenses en Bogotá (Colombia). Una mujer murió anteayer y cinco personas resultaron heridas como consecuencia de la explosión de una bomba colocada en las inmediaciones de la legación estadounidense de aquella ciudad.

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El embajador español en Bogotá, Manuel García-Miranda y Rivas, manifestó ayer a EL PAIS que "actualmente se viven unos momentos de gran tensión en Colombia por las amenazas de los traficantes de droga debido al acoso policial, especialmente norteamericano, en el tráfico de estupefacientes". También precisó que las autoridades colombianas han tomado las medidas "razonables" de seguridad para "disuadir" cualquier posible atentado contra las sedes diplomáticas española y norteamericana.El embajador español en Bogotá explicó que las amenazas fueron realizadas "en llamadas telefónicas anónimas a la cancillería y no eran amenazas personales, sino genéricamente contra todos los funcionarios diplomáticos". Las amenazas fueron recibidas por el mayordomo de la residencia de Manuel García-Miranda después de conocerse la noticia de la detención en España de los mafiosos colombianos dedicados al tráfico de estupefacientes por todo el mundo, especialmente en EE UU.

El embajador español manifestó que había mantenido contactos con el secretario general de la Presidencia de Colombia, con el embajador norteamericano en ese país, Lewis Tambs, con quien cenó el pasado viernes, y con el jefe del DAS colombiano (Departamento Administrativo de Seguridad), general Arenas. Estos contactos tienen el fin de intercambiar opiniones sobre la situación de las bandas mafiosas de traficantes de estupefacientes y sobre las medidas de seguridad desplegadas tras las amenazas.

El embajador norteamericano, Tambs, recibió una llamada personal del presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan, interesándose por la situación de la cancillería en Colombia. Tambs estaba muy preocupado por las amenazas de los traficantes de narcóticos y, especialmente, porque es público en Bogotá que él, personalemente, dirigía las actuaciones norteamericanas en Colombia en todo lo que se refiere al tráfico de estupefacientes, cuya represión ha sido duramente activada en los últimos meses por Estados Unidos.

Manuel García-Miranda resaltó la difusión que había obtenido en Comombia la detención de los traficantes de droga en Madrid y precisó que no tenía datos concretos sobre la penetración de los mafiosos colombianos en España.

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Muertos y heridos

La bomba colocada en las inmediaciones de la cancillería norteamericana en Bogotá produjo un muerto y cinco heridos, lo que ha provocado un estado psicosis en las sedes diplomáticas afectadas al observarse que las amenazas son ejecutadas.La lucha de Estados Unidos contra los traficantes de droga se acentuó el pasado día 1 de este mes cuando barcos de la Armada de este país fueron desplegados por las líneas marítimas del Caribe con el fin de interceptar pesqueros y cualquier tipo de embarcación sospechosa que pudiera transportar estupefacientes. El resultado de esta operación, denominada Hat Trick, ha sido la aprehensión de 80 toneladas de marihuana y grandes cantidades de cocaína, así como la detención en Colombia de más de 60 presuntos traficantes.

Las amenazas llegan a los funcionarios españoles por si nuestro país concede la extradición de los dos jefes mafiosos detenidos en Madrid. Los traficantes de droga también han amenazado con atentar contra el presidente de Colombia, Belisario Betancur, y contra el ministro de Justicia, Enrique Parejo González. Esta mafia ya asesinó al ministro de Justicia, Rodrigo Lara Bonilla, tras iniciarse una campaña de lucha contra los traficantes de estupefacientes.

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