Una comarca con grandes recursos y escaso desarrollo

La convicción generalizada de que El Bierzo guarda en sus entrañas inmensas riquezas no se corresponde con la realidad en que viven sus habitantes. Esta comarca situada al noroeste de León, de 2.954 kilómetros cuadrados y 150.000 habitantes, destaca por producir el 60% de la antracita nacional y tener reservas probables de este mineral para 135 años al ritmo actual de explotación (cuatro millones de toneladas al año).Pero El Bierzo posee también uno de los yacimientos de hierro más importantes de Europa, cuya explotación está paralizada, y cuenta con reservas estimables de plomo, estaño y wolframio. La tradición minera, y quizá la leyenda sobre su riqueza, le viene de cuando los romanos utilizaron 100.000 esclavos para exprimir las vetas auríferas de Las Médulas.

La comarca es fundamentalmente agrícola, con minifundios que, en la mayoría de los casos, actúan como economía complementaria. Aunque cuenta con un valle extremadamente fértil, favorecido por un microclima, donde se suceden los frutales, el cultivo de huerta, la vid y el tabaco, el 30% de su superficie es improductivo, y sólo una quinta parte está labrada.

La zona cuenta con 7.991 parados, que, en porcentaje, representan algo menos de la media nacional, y tiene puestas sus esperanzas en el resurgir del carbón, el verdadero motor de su economía, con ingresos anuales próximos a los 40.000 millones de pesetas. El Bierzo, paradójicamente, perdió el tren de la industrialización en los años del desarrollismo.

La historia industrial de la comarca está muy unida a una empresa, Minero Siderúrgica de Ponferrada, que nació casi con el siglo y padece una grave crisis financiera. Factura 12.000 millones de pesetas al año, pero sus gastos son superiores. La Minero posee un ferrocarril de vía estrecha, de 64 kilómetros de longitud, para un transporte de carbón que hasta hace dos años era arrastrado por máquinas de vapor. También tiene en el centro de Ponferrada una montaña de carbón, un monumento construido con desechos que las nuevas técnicas de relavado han convertido en rentable. La empresa emplea a 3.850 personas, de ellas 965 en la ciudad, pero prevé fuertes reducciones de plantilla.

ENDESA (Empresa Nacional de Electricidad, SA), que el pasado año produjo 6.564 gigavatios/ hora de electricidad, absorbe la gran mayoría del carbón de la comarca, que en un 80% se destina a las térmicas. El resto de la industria berciana, salvo una cementera (Cosmos) y una pequeña acería (Roldansa), apenas tiene relevancia.