Cerca de 3.000 ejemplares en la II Muestra del Libro Antiguo, abierta en Madrid

Desde que Gutenberg inventó la imprenta hasta finales del siglo XIX se editaron multitud de libros o documentos, de los que desde hoy hasta el próximo martes se puede ver una importante colección. La II Muestra del Libro Antiguo, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, que reúne 3.000 ejemplares, ha sido realizada por 20 libreros anticuarios españoles, y desean con esta exposición poner al alcance del público lo que suele pertenecer a un estrecho círculo de entendidos en la materia.

Entre los 3.000 libros de la muestra, el visitante puede encontrar un poco de todo: incunables, góticos y ejemplares excepcionales valorados en 300.000 y 400.000 pesetas, precio máximo en este mercado dentro del ámbito español. También habrá, como contrapartida, libros cuyo precio no exceda el mínimo establecido de 5.000 pesetas.Muchos de esos libros y documentos expuestos en el Círculo de Bellas Artes son difíciles de localizar en bibliotecas y librerías, ya que no suelen estar expuestos al público. Destacan, entre otros, tres ejemplares de El Quijote editados por Joaquín Ibarra en el siglo XVIII.

La imprenta de Madrid de este editor, nombrado impresor de cámara por el rey Carlos III, alcanzó celebridad mundial en la época, y son, entre los entendidos, libros muy buscados. "Realmente", dice uno de los anticuarios, "esta exposición es de la máxima categoría, ya que recoge ejemplares de lo más importante que se puede encontrar hoy día en España y a los que ni los bibliófilos tienen acceso fácilmente".

Las materias de las que tratan los libros expuestos son muy diversas. Así, el visitante puede encontrar en los puestos tomos ilustrados de viajes, mapas de ediciones antiguas, obras de ciencias, de arquitectura, de juegos o de folklore.

Los organizadores, que insisten en la dificultad de resaltar una u otra obra, dada la amplitud de la muestra, han destacado, además de los tres ejemplares de El Quijote de Ibarra, "y en especial la edición de la Academia de 1870", el Diccionario de la lengua española, en un solo tomo, también del mismo año; una excepcional colección particular de ejecutorias que abarcan desde el siglo XIII hasta Carlos III, y un "rarísimo" cantoral renacentista de grandes dimensiones que tiene un peso superior a los 60 kilos.

Libro Antiguo y de Ocasión en Logroño

La exposición permanece abierta mañana y tarde, desde hoy y hasta el martes próximo, 37 la mayoría de los ejemplares están a la venta.En Logroño se está celebrando también, hasta el día 4 de noviembre, la tradicional Feria del Libro Antiguo y de Ocasión, que se organiza por quinto año consecutivo, informa Antonio Moral. Ante la falta de acuerdo estos últimos años entre los libreros logroñeses y el ayuntamiento o la Consejería de Cultura riojana en torno a la organización de la tradicional Feria del Libro de Primavera, esta Feria del Libro Antiguo es la única posibilidad con que cuentan los lectores logroñeses de encontrarse en la calle con la exposición y venta de libros. Doce casetas situadas a lo largo de 125 metros en la céntrica plaza de El Espolón exhibirán, junto a unos cuantos libros antiguos procedentes generalmente de bibliotecas particulares y cuyo valor no suele ser muy elevado, una mayoría de colecciones y restos de serie, aunque el libro antiguo sigue actuando como reclamo para el público.

La experiencia de años anteriores indica que el éxito económico de esta feria, organizada únicamente por la iniciativa privada, se basa en la venta de libros de lance o libros de ocasión. Lo que más se expone y mayores beneficios produce es la venta de restos editoriales de empresas con problemas económicos.

La organización de la feria, en la que no ha participado el gremio de libreros de Logroño, corre a cargo de los propios expositores riojanos, que han facilitado las casetas sin cobrar gastos de alquiler para aquellos libreros de fuera que han querido participar. A esta quinta edición de la feria asisten expositores de Madrid, Bilbao, Valencia, León y Barcelona, además de los organizadores riojanos.