El Instituto Español de Oceanografía, infradotado para asesorar al Gobierno en materia pesquera

La falta de personal del Instituto Español de Oceanografía (IEO) ha impedido la asistencia a determinados grupos de trabajo del Consejo Internacional para la Exploración del Mar, cuyas reuniones de trabajo se celebraron la semana pasada, según anunciaron fuentes del IEO. Los informes que el IEO elabora sobre especies marinas son pieza fundamental de los distintos Gobiernos para la dotación de licencias y cupos de pesca a otros países.

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación cuadruplicó los presupuestos del IEO en 1984: de 400 millones de pesetas en 1983 se pasé a 1.700 millones en 1984, justificadas en la creación de plantas de producción de alevines a nivel industrial, aparte de estudios de caladeros de pesca, medio ambiente y acuicultura marina. Sin embargo, el ministerio no dotó al IEO de un aumento proporcional de plantilla. Para este próximo año los presupuestos se mantendrán similares, y probablemente se seguirá con la política de no contratación. El resultado es la infradotación humana del instituto, según indicaron fuentes de la dirección y del comité de empresa del IEO.

El IEO es el organismo encargado de asesorar a la Administración, proporcionando los datos sobre pesquerías que el Gobierno presenta en los diversos foros internacionales donde se discuten y regulan los acuerdos pesqueros. La plantilla del IEO está compuesta de 150 funcionarios y 105 contratados laborales. En enero no se renovó el contrato a otros 38 trabajadores eventuales, lo que se encuentra en trámite de solución al incluirles próximamente de nuevo en plantilla hasta diciembre de este año.

Nueve plantas de producción

La contratación de nuevos trabajadores no la hacen posible los cuadros macroeconómicos elaborados en el Ministerio de Hacienda, según indicaron fuentes de la dirección. En los planes previstos de ampliación de plantilla, el IEO elaboró un informe en el que se preveía la contratación de 340 personas que cubrieran las necesidades programadas. El informe fue elevado al Ministerio de Agricultura y Pesca, que negoció sin resultado positivo con el Ministerio de Hacienda, según fuentes del comité de empresa del IEO. La Administración justifica el incremento de presupuestos de 1983 a 1984 en la creación de nueve plantas de producción industrial de alevines, que se realizan en colaboración con las comunidades autónomas. Estas plantas se encontrarán terminadas al final de la actual legislatura, según las mismas fuentes, que añadieron que para entonces será necesario contratar un importante número de trabajadores.

Este año el IEO ha dejado de asistir o no ha enviado los datos necesarios a los grupos de trabajo de merluza, sardina, rape, gallo, caballa y bacaladilla, entre otras especies, del Consejo Internacional para la Exploración del Mar. En estas reuniones se evalúa el estado de explotación de los excedentes y se proponen las medidas de regulación y los cupos de captura. El consejo incluye a los países europeos ribereños, más Estados Unidos y Canadá.

Los informes técnicos que el consejo aprueba no son vinculantes para los países. Sin embargo, son las más prestigiosas informaciones con que cuentan éstos a la hora de delimitar los cupos de captura y las licencias para la pesca propia y las embarcaciones extranjeras. La CEE basa los cupos que otorga a terceros países en virtud de estos informes, aunque siempre quede aparte la voluntad política de los distintos Gobiernos.

Tampoco se han podido cumplir los compromisos técnicos relativos al acuerdo de pesca con Marruecos, y "que inciden fundamentalmente en la aportación bilateral de datos de excedentes pesqueros y estudios de zonas castigadas por la pesca", según indicaron fuentes de los trabajadores. "En este caso es mayor el problema, al carecer Marruecos, en gran medida, de estudios de este tipo", añadieron fuentes del comité de empresa.