Un comando guerrillero salvadoreño se entrega a la policía tras permanecer en un banco con 64 rehenes durante 20 horas

Los cuatro guerrilleros salvadoreños que permanecieron encerrados durante 20 horas junto a 64 rehenes en la sede de un banco se rindieron ayer "incondicionalmente" al no encontrar ningún país que les concediera asilo político. El Gobierno español había accedido a concederles asilo temporal en la sede de su Embajada en San Salvador con la condición de que un tercer país los recibiera posteriormente.

Según informó la emisora salvadoreña Radio Nacional, la rendición de los cuatro guerrilleros, miembros del brazo armado del Partado Comunista Salvadoreño, que asaltaron el jueves la central bancaria de Soyapango, a seis kilómetros de San Salvador, con intención de efectuar un atraco, se produjo "con la mediación de la Cruz Roja Internacional".Pablo Hércules Pineda, miembro del Tribunal Supremo de Justicia, y Adolfo Rey, ministro de la Presidencia, fueron los encargados de dialogar con los guerrilleros para conseguir que éstos se entregasen a las autoridades judiciales.

Fuentes oficiales declararon que el Tribunal Supremo de Justicia de El Salvador se ha hecho cargo de los guerrilleros.

El jefe de la policía de Hacienda, coronel Rinaldo Golcher, había afirmado ayer, tras nueve horas de negociaciones entre los guerrilleros y diversas embajadas con el fin de lograr la liberación de los rehenes, que el Gobierno español había decido conceder asilo político a los cuatro asaltantes del banco.

Pocas horas después, sin embargo, el Ministerio de Asuntos Exteriores español desmintió esta información al aclarar que Madrid sólo concedería a los guerrilleros "una protección temporal en los locales consulares" en San Salvador, por considerar que el asalto al banco constituye un acto "típicamente terrorista".

Estas mismas fuentes subrayaron que el traslado de los guerrilleros a la sede diplomática española en la capital salvadoreña sólo comenzaría si un tercer país decidía aceptarlos como refugiados, exiliados a asilados.

Una comisión gubernamental encabezada por el viceministro de Asuntos Exteriores salvadoreño, Ricardo Acevedo, desarrolló conversaciones con las embajadas de México, Colombia, Venezuela, Francia y Suecia, que según fuentes diplomáticas fracasaron por la muerte de un vigilante del banco durante el asalto guerrillero. En dichas negociaciones también participaron la encargada de negocios de la Embajada de España, Inés Argüello, y el Comité Internacional de la Cruz Roja.

Fuentes diplomáticas rechazaron los rumores según los cuales el Gobierno francés había aceptado a última hora acoger a los guerrilleros.

Los cuatro guerrilleros irrumpieron el jueves en una filial del Banco Agrícola Comercial situada en Soyapango para efectuar un atraco. Los asaltantes llegaron ante la sede del banco en un coche marca Mercedes Benz que habían robado poco antes en el centro de la capital salvadoreña y en cuyo interior fueron halladas dos cargas explosivas.

Un muerto

Durante el asalto, uno de los guerrilleros mató a tiros al vigilante Juan Humberto González, de 53 años, que intentó desenfundar su pistola para hacer frente a los guerrilleros. Al ser sorprendidos por una patrulla militar, los asaltantes se encerraron en el local junto a 64 empleados y clientes que se hallaban en ese momento en el edificio, que fue inmediatamente rodeado por las fuerzas militares salvadoreñas.Poco después de que se efectuara el asalto, un helicóptero se situó a un metro del techo del edificio y lanzó varios objetos, lo que creó un fuerte nerviosismo.

Un helicóptero militar sobrevoló de nuevo en la madrugada el barrio de Soyapango, donde se halla el banco asaltado, con el fin de observar la supuesta presencia de otros grupos guerrilleros.

El coronel Golcher declaró que la inteligencia militar fue advertida de la intención de grupos guerrilleros de auxiliar a los cuatro miembros del FMLN.

A través de varias emisoras locales, los guerrilleros exigieron la retirada de los soldados y anunciaron que, de lo contrario, matarían a los rehenes. Los guerrilleros también pidieron la mediación de la Cruz Roja y de la Iglesia salvadoreña para negociar la liberación de los rehenes.

Pocas horas antes de rendirse, los autores del frustrado atraco liberaron a siete mujeres -una de ellas embarazada- y tres niños. Según declaró Golcher, tras prestar declaración en el Juzgado de Soyapango en presencia de miembros de la Cruz Roja Internacional, los guerrilleros serán ingresados en la cárcel de Mariona, en las afueras de San Salvador. A principios del pasado mayo, un grupo de guerrilleros asaltó un supermercado y mantuvo como rehenes a un centenar de personas que fueron liberadas tras el logro de un acuerdo con el Gobierno que permitió a los asaltantes salir del país rumbo a México.