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Rechazados dos planes demócratas para reducir el intervencionismo de EE UU en Centroamérica

El comandante Daniel Ortega, coordinador de la Junta de Gobierno de Nicaragua, tras su encuentro con Konstantín Chernenko en Moscú, viajará a Berlín Este e incluso es probable que haga una gira relámpago por todos los países del Pacto de Varsovia, según fuentes latinoamericanas en Moscú. En Washington, mientras, la política centroamericana de la Administración Reagan recibió ayer un nuevo espaldarazo al rechazarse en el Congreso un proyecto demócrata para recortar fondos a los contras nicaragüenses y restringir el poder del presidente para enviar tropas al istmo centroamericano.

La Embajada de Nicaragua en Moscú confirmó ayer a France Presse que Ortega se dirigirá a Berlín cuando hoy salga de Moscú, pero no amplió la información sobre otros destinos. Según el programa inicial, Ortega debería volver a Managua tras su visita de tres días a la capital soviética.El comandante Ortega fue recibido el lunes por el número uno de la URSS, Konstantín Chernenko, quien le garantizó la "solidaridad del pueblo soviético con el heroico pueblo de Nicaragua" y el apoyo a su régimen. Durante la, se acordó "condenar resueltamente la política hegemonista de EE UU en América Central y en la cuenca del Caribe".

A las pocas horas de que Chernenko y Ortega manifestaran tales puntos de vista, el Senado norteamericano rechazaba sendas propuestas demócratas para impedir el empleo de tropas de combate en El Salvador y Nicaragua y para recortar la ayuda a la guerrilla antisandinista, señala AFP desde Washington.

La segunda de las enmiendas, defendida por los senadores demócratas Edward Kennedy y Daniel Inouye, pretendía limitar la ayuda a los contras en el presupuesto de defensa para 1985 a seis millones de dólares (unos 900 millones de pesetas), dos de ellos destinados a sostener una retirada rápida de Nicaragua, y cuatro para ayudarles a instalar se fuera del país a condición de que depusieran las armas. El Gobierno tiene solicitados para los antisandinistas, en el año fiscal de 1985, 28 millones de dólares. El plan demócrata fue rechazado por 58 votos contra 38.

Previamente, el Senado había rechazado, por 63 votos contra 31, otro proyecto de enmienda que hubiera impedido a las fuerzas aéreas y terrestres norteamericanas intervenir en El Salvador y en Nicaragua.

Aunque al final los republicanos ganaron holgadamente, la Administración tuvo dudas sobre la votación, hasta el punto de que el vicepresidente George Bush se presentó en la sesión vestido de frac, después de una cena de gala en la Casa Blanca, por si su voto era necesario para romper el empate, indica Efe.

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