El Gobierno de Costa Rica acusa a Managua de violar su territorio con fuego artillero

El Gobierno de Costa Rica ha acusado al de Nicaragua de violar su territorio con fuego de artillería pesada durante la ofensiva que el Ejército sandinista desarrolla desde el domingo contra la guerrilla de ARDE (Alianza Revolucionaria Democrática). El ministro interino de Asuntos Exteriores, Jorge Urbina, aseguró que varios proyectiles habían caído hasta seis kilómetros en el interior de Costa Rica, en el sector de Poco Sol.

Por instrucciones directas del presidente Luis Alberto Monge, que se encuentra de visita oficial en Europa, el martes por la noche fue convocado el Consejo Nacional de Seguridad que, según se afirma, acordó endurecer su actitud respecto a Nicaragua, siguiendo las tesis del viceministro de Gobernación, Enrique Chacón, considerado como el funcionario costarricense más próximo al líder de ARDE, Edén Pastora.Al mediodía de ayer se esperaba una declaración oficial del Gobierno, que permanecía reunido desde las siete de la mañana. Por esta razón se congelaron las dos notas de protesta elaboradas con anterioridad por la cancillería: una por la violación territorial y otra por la guerra verbal que a su juicio han desatado los sandinistas, contradiciendo así el acta constitutiva de la comisión de control de la frontera.

Urbina ha denunciado que el Gobierno nicaragüense les pide moderación en sus declaraciones al tiempo que levanta falsas acusaciones. Esto está relacionado con la versión oficial qué dio el Ministerio de Defensa de Nicaragua en el sentido de que los guerrilleros de ARDE habían entrado en ese país a través del río Machuca, con apoyo de un helicóptero y disparos de mortero realizados desde Costa Rica.

En las inmediaciones del río San Juan, el Ejército sandinista ha lanzado una intensa ofensiva contra las guerrillas de ARDE, en un momento en que esta organización está descabezada.

Numerosos combatientes han huido hacia suelo costarricense. La guardia rural admite que 27 guerrilleros han entregado sus armas, planteando así un nuevo y delicado problema político, ya que no pueden ser tratados como refugiados.

La guerra interna de Nicaragua se agudiza también en el Norte, donde el FDN anuncia la apertura de un nuevo frente bélico en el departamento de Boaco.

Por otra parte, la decisión del Consejo de Estado de aplazar los debates sobre la ley de medios de comunicación hasta que se reúna la futura asamblea ha causado alivio en la oposición, que se había retirado en bloque por entender que el levantamiento de la censura de Prensa quedaría anulado con esta ley.