Moscú busca la modernización del sistema productivo

Las últimas estadísticas económicas son motivo de optimismo en la URSS, pese a que el pronóstico para la próxima cosecha no sea muy favorable debido a la falta de humedad del suelo y a que hay dificultades técnicas para obtener la producción de petróleo en Siberia occidental, donde se extrae aproximadamente la mitad del crudo soviético, fuente del 60% de las divisas que entran en el país.Un ejercicio desarrollado totalmente bajo el mandato de Yuri Andropov, 1983, se saldó con una recuperación económica respecto a los dos años precedentes. La producción industrial creció un 4% (por encima de lo previsto), el comercio con los países industrializados occidentales remontó el déficit de 1981 y 1982 y alcanzó un superávit de 1.000 millones de rublos (un rublo equivale a 200 pesetas) en el marco de un superávit global más de ocho veces superior. Este balance positivo fue posible gracias a la disminución de las importaciones agrícolasy a las ventas de gas y petróleo. Estas últimas lograron, a base de cantidad, compensar el descenso del precio del crudo en los mercados internacionales.

La cosecha de 1983 se quedó por debajo del plan (238 millones de toneladas), pero superó los 190 millones de toneladas, rompiendo así la mala racha comeñzada en 1979. Además, la URSS anuncié a principios de este año la entrada en funcionamiento del gasoducto siberiano, que, de acuerdo con lo previsto, ha de llevar a Europa occidental, por un trayecto de 4.500 kilómetros, el combustible que a final de siglo será la principal fuente de energía de la URSS y el principal objeto de su exportación.

"El presidente Ronald Reagan ha estimulado nuestra industria. Ahora producimos unidades de bombeo y compresores que antes no teníamos", dice con orgullo un experto gasístico soviético refiriéndose al embargo norteamericano contra el gasoducto. Medios occidentales, sin embargo, han. expresado sus dudas sobre tales afirmaciones. El embargo de cereales del presidente Jimmy Carter, a su vez, hizo poco efecto a la URSS, que diversificó así sus compras de grano, reduciendo su dependencia de EE UU en este aspecto.

En los primeros tres meses de este año la producción industrial creció un 4,9% en relación al mismo período del año anterior.

Necesidad de cambios

Dotada de enormes recursos naturales en gran parte aún por explotar, la URSS arrastra, sin embargo, un conjunto de problemas de gestión (ineficiencia, burocracia, infrautilización del potencial productivo" escaso, rendimiento) que lastran gravemente su economía. A principios de, marzo, el líder soviético, Konstantín Chernenko, reconocía que la economía de la URSS necesita profundos cambios cualitativos" después de haber utilizado los recursos de superficie, a saber, la organización, el orden y la disciplina. Lo que nadie parece saber a ciencia cierta en la URSS es la naturaleza y alcance de los cambios cualitativos que deben realizarse para pasar de un sistema donde las necesidades básicas están cubiertas a nivel elemental (con lagunas esporádicas) a otro con mayor calidad de vida."El ejemplo de Hungría de muestra que socialismo y eficacia no son incompatibles", comentaba un observador político occidental en Moscú. La prioridad de la industria bélica a costa de la descentralización económica y la autonomía empresarial, así como la estructura de poder soviética, marcan las diferencias con Budapest, cuya reforma económica, en el sentido de dar mayor participación a la iniciativa privada en el sector servicios y en industrias no básicas, conocía muy bien Andropov.

Iniciativas privadas modestas, en un principio legales, son ahogadas a veces en la URSS por el mismo sistema, reticente incluso ante un pequeño negocio de producción y venta de camisetas estampadas. El resultado de esto es una amplia economía sumergida que proporciona servicios y bienes de consumo deficitarios en el mercado oficial.

"En la época de Breznev", comentaba un sociólogo soviético, "se desarrolló un pacto social implícito. El trabajador tenía una oferta de bienes de consumo limitada a su alcance, pero, en cambio, se le exigía poco en el trabajo y se hacía la vista gorda al absentismo, la relajación e incluso la corrupción".

Con Andropov, el pacto social parecía llegar a su fin. Durante su efiniero paso por el poder, el dirigente la emprendió con los males morales del sistema productivo y combatió la falta de disciplina laboral.

Crear incentivos

En un intento de crear incentivos materiales para un mayor interés laboral, el sistema trata actualmente de ligar el rendimiento al sueldo y aumentar hasta cierto punto la autonomía de la empresa. Durante la época de Andropov se'ha potenciado el sistema de brigadas de trabajo, donde el salario percibido depende del resultado final del trabajo encomendado. Desde principios de enero se han iniciado una serie de experimentos en empresas dependientes de varios ministerios, entre ellos el de Industria Alimenticia de Ucrania, que es responsable de la quinta parte de toda la industria alimenticia del país. Si el plan se cumple, los trabajadores reciben primas de hasta un 15% sobre su salario. La extensión del experimento a todo el territorio de la URSS, no obstante, depende de su éxito en esta fase.Aumentar el nivel de aprovisionamiento de la población es uno de los objetivos formales de las autoridades soviéticas en la actualidad. Para ello, el plan de 1984 da una ligera prioridad a la industria de bienes de consumo (4% de incremento) frente a la industria pesada (3,7% de incremento previsto). El aprovisionamiento ha mejorado en los úítimos años, pero aún ahora "se compra lo que se encuentra y no lo que se busca", en palabras de un ama de casa soviética.

Durante los tres años transcurridos del actual plan quinquenal, la agricultura colectivizada no consiguió cumplir los planes de abastecimiento al Estado de cereales, ganado, aves, leche y otros productos, según datos oficiales. La agricultura privada, limitada al 3% de la superficie útil, supone un 25% de la producción agrícola, que se vende en el mercado libre a precios determinados por la oferta y la demanda.

Para este año, la inversión en agricultura se ha incrementado un 13%. respecto a 1983. Un programa alimenticio, lanzado en mayo de 1982 e impulsado en tiempos de Andropov, trata en la actualidad de mejorar el abastecimiento y reducir la dependencia de las importaciones. En el campo del comercio exterior, Moscú quiere llegar a una cooperación más estrecha en el marco del Comecon (Mercado Común socialista), donde la URSS es el socio más poderoso y principal suministrador de energía.