Melina Mercouri anuncia en el festival de Berlin una nueva ley para el cine griego

Una ley de protección al cine griego, que ayude a desarrollar su propia entidad y combata, por tanto, el monopolio del cine norteamericano, fue anunciada por la actriz Melina Mercouri, actual ministra de Cultura en Grecia, en el transcurso de! la conferencia de prensa que se celebró en torno a Rembetiko, dirigida por Costa Ferris, que es la única película griega en la competición del Festival de Berlín. "Hay que ganar la batalla", dijo la actriz, ',y si el público nos ayuda, barreremos el cine norteamericano"

La futura ley de protección al cine griego contará con unas disposiciones muy similares a las recientemente decretadas en España, que tratarán de apoyar la existencia de un cine "que no sea ya el de la abuelita, es decir, el que se financiaba sólo con el dinero que podían reunir los directores entre sus amigos y familiares". Aunque estas medidas tendrán un sistema propio "como nuestro socialismo", se inspiran en las de las cinematografías francesa y alemana. "Fundamentalmente atiende aspectos económicos que estimulen al productor-creador" y que también tomen en cuenta la exhibición de los filmes.Consultado por este periódico el director general de Cinematografía griega matizó que este aspecto de la nueva ley consistirá en conceder subvenciones económicas a los locales que proyecten al año un determinado número de filmes griegos y que, por otro lado, no tengan compromiso en exclusiva con alguna distribuidora.

Melina Mercouri se mostró locuaz y sincera, en un claro afán de llamar la atención sobre el cine de su país, al que quiere lanzar a todo el mundo ("el año pasado organizamos una produción en Estados Unidos y este año lo haremos en Polonia"), pero consideró que ese esfuerzo no puede ser aislado: "Nuestro problema con el cine es común al de los demás países europeos y, por tanto, debemos unirnos para organizar bases comunes. El próximo mayo habrá en París una reunión en la que trataremos de identificar las disposiciones que tenemos en nuestros países respectivos. Estamos aún hablando de: fusiles cuando el tema se trata va en términos de misiles".

Aunque su aparición en la conferencia de prensa de Rembetiko había despertado algunas suspicacias por lo que significa de apoyo directo a una película en competición, por unir Melina Mercouri a su condición de actriz popular la de ser la esposa de Jules Dassin, vicepresidente del jurado de este festival y con el que, por otra parte, comparte el homenaje que a su cine se desarrolla en, Berlín, lo cierto es que en su intervención sólo hubo una referencia concreta a la película, y no exenta de humor: "La cultura griega empieza en el Partenón y, por hoy, acaba en la película de Costa Ferris".

El filme en cuestión recoge las muy distintas variantes del Rembetiko, viejo modelo de canción popular convertida ahora en música para turistas. Originalmente fue el medio de expresión de grupos marginados que, reunidos en tascas, manifestaban así sus preocupaciones y deseos. Los cambios sufridos por el Rembetiko a lo largo del tiempo corresponden en la medida a los que vive su protagonista, una conocida cantante del género: en conjunto, un melodrama de larga duración al que probablemente sobra más de un tópico.

Otra conferencia de prensa es reseñable, al margen de la convocada en torno al filme norteamericano de inmediato estreno en España, La fuerza del cariño, de James L. Brooks, exhibido en Berlín fuera de concurso. Ni la presencia de Jack Nicholson -que sólo secunda en el reparto a sus auténticas protagonistas, Shirley MacLaine y Debra Winger- despertó interés entre los periodistas, prácticamente sepultados por los fotógrafos, que ocuparon la casi totalidad del tiempo. Me refiero a la conferencia de prensa que se produjo tras la proyección de La muerte de Mikel, en la que sólo su director, Imanol Uribe, tuvo ocasión de responder.

Los actores principales, Imanol Arias, Amava Lasa y Fama fueron muy aplaudidos, especialmente este último. El filme, proyectado en sesión especial fuera de concurso, llenó la sala y recibió al final unánimes y prolongados aplausos.

Otra conferencia de prensa posterior, convocada por la Asociación Independiente de Productores Vascos (a La muerte de Mikel sucederá, ya en competición, otro título, Akelarre, de Pedro Olea), contó en la mesa con Ángel Amigo, presidente de dicha asociación, y con Aingeru Zabala, director del patrimonio artístico en el Gobierno de Euskadi: las formas de ayuda económica y el criterio en la selección de los filmes fueron los temas más consultados.