Suecia considera un error aislar a Nicaragua y "condenarla a una situación como la de Cuba"
El Gobierno socialdemócrata sueco considera que en Nicaragua existe un régimen "que realmente quiere mejorar la situación del pueblo, y pensamos que lo peor para avanzar hacia el pluralismo verdadero sería aislar a Nicaragua y condenar a los nicaragüenses a una situación como la de Cuba", ha declarado Pierre Schori al enviado especial de EL PAIS a la Conferencia de Desarme de Estocolmo. Schori ocupa en el Ministerio de Asuntos Exteriores sueco un cargo similar al de viceministro.
Schori, antiguo responsable de política exterior del Partido Socialdemócrata y hombre de confianza de Olof Palme en asuntos internacionales, llega hoy a España con objeto de preparar la visita qué este mismo año llevará a cabo a nuestro país el primer ministro de Suecia, Olof Palme. El tema centroamericano estará en el centro de las conversaciones que el alto funcionario sueco mantendrá en Madrid.Suecia considera que "ahora no es suficiente esconderse detrás de una declaración formal de apoyo a Contadora, porque el último documento del grupo (integrado por México, Panamá, Colombia y Venezuela) sobre América Central -incluye propuestas precisas en lo económico, político y militar".
A juicio de las autoridades suecas, que entienden el conflicto en Centroamérica como "un problema Norte-Sur y Este-Oeste", Estados Unidos está ahora obligado "a optar entre Contadora y el apoyo a los grupos contrarrevolucionarios". Schori cree que "la Administración de Estados Unidos parece estar en la línea del informe de la comisión para Centroamérica presidida por el ex secretario de Estado Henry Kissinger, que tiene aspectode la Alianza para el Progreso o del Plan Marshall, sin tener en cuenta que el Plan Marshall se aplicó para el desarrollo de países después de una guerra, y ahora habría que hacerlo en países en guerra".
Lo ideal para el Gobierno sueco sería, sin embargo, "poner el enfoque en las *Propuestas políticas de Contadora, que aceptan la soberanía nacional de todos los países, la coexistencia de distintos sistemas políticos y plantean medidas de confianza como la creación de zonas desmilitarizadas". "No veo esto en el informe Kissinger,", añade Schori.
La posición de Europa, que por ahora es "un poco tímida" según el alto funcionario sueco, debería evolucionar en el sentido de "apoyar concretamente esas medidas de Contadora y demostrar que su preocupación por los derechos humanos y la soberanía nacional de los pueblos no es selectiva para los países del bloque comunista o para Afganistán, sino que es global. Precisamente para marcar esa universalidad de nuestros principios viaja este mes Olof Palme a México, Nicaragua y Costa Rica".
"España", según Schori, "tiene un papel singular y una gran oportunidad por lazos históricos y conocimientos".
"Suecia", explica, "tiene un gran programa de ayuda para los refugiados de la región. Hemos nombrado un diplomático especial para Centroamérica. Tenemos un programa de ayuda para la reconstrucción de Nicaragua de 75 millones de coronas (unos 1.500 millones de pesetas), y estamos empezando otro programa para Costa Rica". "I`ero nosotros no utilizamos nuestra ayuda en cooperación técnica como una medida política, como hace Estados Unidos".
La neutralidad de Suecia es, según Pierre Schori, "política en el sentido de que la hemos definido nosotros mismos".
Neutralidad real
"Para obtener credibilidad", añade, "necesitamos demostrar al mundo exterior que realmente somos neutrales y que en caso de guerra no vamos a optar por un bando u otro y no vamos a permitir que nuestro territorio sea una base para una, potencia u otra. Debemos demostrar también que tenemos un ejército capaz de defender nuestro territorio, y para ello gastamos mucho en nuestra defensa y producimos nosotros mismos aviones, tanques, misiles, submarinos, sistemas antiaéreos, etcétera. No creemos en un desarme unilateral, y sólo creemos que podremos bajar el nivel actual de gastos de defensa en un ambiente de desarme general a nivel internacional".Pierre Schori cree que España debe elegir la opción defensiva que prefiera, teniendo en cuenta que "lo importante es que no haya un cambio radical que ponga en peligro la estabilidad de un sistema".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.