Julio Alvar recopila el cancionero popular de Aragón

El antropólogo Julio Alvar ha recopilado alrededor de 600 canciones, cuentecillos o romances de la literatura oral aragonesa, que se transmitía de padres a hijos, cuya primera entrega ha sido editada por Guara en cuatro carpetas bajo el título genérico de Cancionero popular aragonés 80. Las carpetas constan de cinco poemas o canciones en un pliego cada una de ellas; ilustradas con un grabado original de Alvar, en la técnica tradicional del grabado de madera, alusivo a la canción.

Guara Editorial y el autor tienen intención de publicar, en el futuro, sucesivas carpetas hasta completar la recopilación del Cancionero popular aragonés, que constituirá un documento excepcional. El propio Julio Alvar explica que el propósito del Cancionero es "divulgar lo que todavía guardan nuestros hombres de la literatura oral, en estos tiempos en que la palabra y la imagen invaden los hogares, arrinconando en la memoria la herencia del pasado".

Alvar ha respetado "escrupulosamente lo que nos contaron, con las adulteraciones, corrupciones y mutilaciones que el tiempo ha ido introduciendo". Añade que "en recuerdo de la literatura de cordel, hoy desaparecida en nuestro país, decidimos presentar el Cancionero en pliegues sueltos". La ordenación es simple, siguiendo el calendario del santoral. En cada pliegue figura el lugar donde el texto fue recogido, acompañado por la inicial de la provincia.

Con respecto a los temas que tratan las canciones, romances o cuentos, unos son profanos y otros religiosos, aunque, según Alvar, es difícil delimitar en el cancionero aragonés lo profano y lo religioso.

La labor del antropólogo -"no es fruto de una investigación bibliográfica"- se ha limitado a recopilar todo lo que le han transmitido de viva voz. El valor de este Cancionero es testimonial, sirve para rescatar y conservar algo que corría el riesgo de perderse.