Las nuevas becas del CSIC
Ante la actual coyuntura económica del país, y soportando una serie de años, difíciles para encontrar un puesto de trabajo, una de las pocas esperanzas que tenemos los licenciados en paro es conseguir alguna ayuda económica o beca de estudios. para ampliar nuestros conocimientos y conseguir una formación científica adecuada, ello acompañado de una merecida compensación que, aunque nunca llega a la categoría de sueldo, nos estimule suficientemente.Pues bien, en el BOE del 31 de octubre de 1983 se anuncia la convocatoria de becas predoctorales del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que aparecen equiparadas, por primera vez en la historia, a las de la Universidad. Una simple ojeada a las bases de las mismas sirvió para romper radicalmente todos nuestros esquemas, pues uno de los requisitos exigidos es la posesión del título de licenciado desde 1980 en adelante: ¿A qué se debe esta nueva norma? ¿No es suficientemente eliminatorio el análisis detallado del currículo de cada- solicitante? ¿Suponen que los licenciados de años anteriores se encuentran ya en una situación acomodada? Basta un repaso a las estadísticas para demostrar lo contrario.
Comprendemos que somos muchos los que nos encontramos en la misma situación y que por ' ello sea necesaria una adecuada selección, pero queremos hacer constar nuestra más enérgica protesta ante la elegida, puesto que esa exclusión a prior¡ nos parece una injusticia absoluta de cara a los numerosos parados y con sobrados méritos académicos de generaciones anteriores a la de 1980. /
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