Importante hallazgo de restos de la época islámica y medieval en la plaza de los Carros
La nueva política municipal del departamento de Vías y Obras, al realizar cartas arqueológicas antes de meter las excavadoras en el Madrid antiguo, ha permitido realizar un importante descubrimiento: el primer hallazgo de ruinas islámicas en la actual capital de España, y entre ellas, el primer viaje de agua (sistema islámico de canalización de agua potable) que se encuentra en España. Los restos hallados ahora estaban a flor de suelo y junto a la acera.
Un viaje de agua del siglo X, tres silos para grano de la época islámica, restos de una vivienda musulmana subterránea, empedrado y solado de patio de una casa de tipo manchego del siglo XVI -de las que se recogen en el plano de Texeira-, un pozo de aguas negras, bodega y bajada a la misma en vivienda del siglo XVI y más de 60 piezas de cerámica islámica de la baja Edad Media y del siglo XVIII son los principales hallazgos practicados en la plaza de los Carros, de Madrid, por el equipo conjunto de especialistas en arqueología, que, por primera vez en esta ciudad, "van por delante de las excavadoras".La concejalía de Vías y Obras, al plantearse la conversión en peatonal de la plaza de San Andrés, dentro de una operación de peatonalización de varias áreas del Madrid de los Austrias, decidió que se hicieran previamente unas catas arqueológicas en la plaza de los Carros, colindante a aquélla, pues se supone que el segundo cinturón de la muralla islámico-cristiana de Madrid pasaba por esta zona.
Luis Caballero, del Museo Arqueológico Nacional; Manuel Retuerto, del Ministerio de Cultura, y Carmen Priego, del Museo Municipal, empezaron su trabajo a mediados del pasado mes de noviembre, y, "con sorpresa y regocijo" a los pocos días descubrieron "algo mucho más importante que la muralla".
Según estos técnicos, los dos metros del viaje de agua -con su lecho de piedras, presillas y andén-, los silos de grano, los restos de viviendas -indicadores de un arrabal musulmán- y las piezas de cerámica -orinales, jarroncillos y platos- de esta lejana época "dan por primera vez idea de cuál fue la vida ciudadana islámica en Madrid". Añaden que el viaje de agua es "el primero que se encuentra en España". Una de las líneas de investigación del origen de la palabra Madrid defiende precisamente la hipótesis de que significa "lugar de viajes de agua". Los arqueólogos autores de este descubrimiento recalcan lo valioso del hallazgo en general, por cuanto "refleja cómo se establece el proceso urbano de superposición de unos barrios en otros anteriores".
Casi una vajilla entera del siglo XVIII, otros numerosos objetos del siglo XVII y hasta un trozo de porcelana china estaban sedimentados en los silos u otras oquedades ahora descubiertas, donde el paso de los siglos había unido restos de tan diferentes culturas.
Protección del recinto
El ayuntamiento pretende que el recinto del descubrimiento quede protegido. Se estudia la forma de poder mantenerlo a la vista del público durante algunos días. Se considera, no obstante que será conveniente dejar estas ruinas al resguardo bajo algún solado con trampilla que permita el acceso a estudiosos del tema, así como a los arqueólogos que vayan a continuar la inspección en las galerías de la bodega descubierta.Por otra parte, se intentará ampliar los trabajos arqueológicos en la actual plaza del Humilladero, unida a la de los Carros por la de San Andrés, donde se estima que puede hallarse la puerta de Moros. Se continuará el rescate de nuevos restos de la muralla, partiendo de lo ya conocido en un solar situado entre la Cava Baja y la calle de los Almendros.
La iniciativa municipal de realizar catas arqueológicas antes de proceder al ínicio de cualquier tipo de obras que afecten al suelo y al subsuelo del Madrid antiguo va a ser estudiada como medida ampliable, en su aplicación, a otros organismos oficiales, así como a la iniciativa privada.
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