La recuperación de los cuentos de Calleja, un atractivo del Salón del Libro Infantil

La recuperación de las obras más destacadas de entre las publicadas en su día por la desaparecida editorial Saturnino Calleja, pionera en España de la edición de libros para la infancia y la juventud, que desarrolló su actividad en las décadas finales del siglo pasado y primeras de este siglo, se presenta como exposición-homenaje a la figura y la obra del popular editor, dentro del VII Salón Nacional del Libro Infantil y Juvenil. Éste ha sido organizado por el Instituto Nacional del Libro Español (INLE), con el patrocinio del Ministerio de Cultura y la colaboración de la Comunidad Autónoma de Madrid y de los editores españoles de la especialidad.

Tanto las características como las actividades de esta séptima edición del Salón Nacional del Libro Infantil y Juvenil se han visto ampliadas en diversos aspectos con respecto a años anteriores. La exposición-sala de lectura, integrada por más de 2.000 títulos de literatura infantil y juvenil publicados durante los últimos años, se ve enriquecida por los anaqueles destinados a la exhibición de los nombres de los autores, y de las obras galardonadas recientemente con los premios nacionales de literatura infantil y juvenil en sus diversas modalidades. También se exponen los libros que han obtenido la calificación de libros de interés infantil y aquellos que han merecido el calificativo de libros mejor editados, dentro de la misma especialidad, en los concursos que anualmente convoca y patrocina el Ministerio de Cultura. Igualmente figuran los nombres de los autores e ilustradores recientemente galardonados, con los premios Lazarillo 83 por su labor como escritores e ilustradores.

Otras actividades que se desarrollan paralelamente dentro de este VII Salón Nacional del Libro Infantil y Juvenil son la exposición de ilustradores -presentada por las respectivas editoriales y referida a la obra de 37 artistas-, el concurso de redacción escolar Escribe un cuento fantástico -convocado entre los escolares de la Comunidad Autónoma de Madrid- y diversas conferencias, mesas redondas y coloquios que girarán en torno al mundo de la literatura infantil y juvenil.

La exposición-homenaje dedicada a la editorial Saturnino Calleja cuenta con numerosas pu blicaciones de la época, así como con pequeños datos sobre la figura del popular editor, cuyas publicaciones llegaron a todas las capas sociales y fueron leídas por los niños y jóvenes de últimos del XIX y primeros del XX.

La editorial constaba de diversas colecciones, la mayoría de ellas de carácter recreativo, aunque, como el mismo Calleja señalaba, "son libros que educan la imaginación, sin traspasar jamas las barreras de la más pura moral". Su creación más característica, sobre todo en una segunda época editorial, eran los famosos cuentos de Calleja en colores, donde se ofrecían textos con una visión renovada de los más populares cuentos tradicionales.

Para Calleja trabajaron afamados ilustradores de la época, y el prestigio, en cuanto a calidad de las obras publicadas, venía fundamentalmente dado por los dibujantes que ilustraban los libros de la editorial, ya que los textos ofrecían mayor desigualdad y el rigor literario no era un aspecto destacable en las innumerables ediciones de Calleja.

Entre los más conocidos ilustradores, cuyas obras para la editorial están recogidas en la exposición-homenaje, figura segura mente a la cabeza Salvador Bartolozzi, creador de los populares Pinocho y Chapete, que alcanzaron un considerable éxito entre 1919 y 1936, así como la revista Pinocho, creada en 1925 y desaparecida en 1931, donde colabo raron escritores como Antonio rrobles, Magda Donato, López Rubio, Manuel Abril o Neville.

Otros ilustradores que traba jaron para Calleja eran Rafael de Penagos, renovador del arte del cartel y de la ilustración en España; Ángel Díaz Huertas, colaborador destacado de Blanco y Negro; Federico Ribas y el escenógrafo José Zamora.