Castilla-La Mancha inaugura la primera experiencia del videotex al servicio del desarrollo regional

La primera experiencia de videotex puesto al servicio del desarrollo regional en España fue inaugurada oficialmente ayer con la firma de un convenio entre el presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, José Bono, y el presidente de la Compañía Telefónica Nacional de España, Luis Solana.Por este convenio, una de las comunidades autónomas con menos recursos incorpora a su desarrollo económico, social y cultural la telemática, considerada en estos momentos como la tecnología comunicativa más vanguardista. La Compañía Telefónica Nacional pondrá al servicio de la comunidad de Castilla-La Mancha todos los medios materiales y la infraestructura técnica necesaria.

De momento, la instalación de 15 terminales de videotex y los servicios de teletex en diversos puntos de la comunidad castellano-manchega, tiene carácter experimental. Dentro de un año se estabilizará el servicio de videotex, con los datos más esenciales de las provincias de Guadalajara, Cuen ca, Toledo, Ciudad Real y Albacete.

El videotex es un sistema de información en pantalla que utiliza un televisor convencional con un adaptador, conectado a una línea telefónica, que se convierte en un terminal telemático universal. Este sistema permite recibir textos, datos y gráficos y en un futuro próximo la imagen y la voz. Cuando va dotado de un pequeño teclado, se convierte en un sistema interactivo con capacidad para buscar la información deseada.

Entre los servicios que se incluyen en el programa videotex de Castilla-La Mancha figuran los temas de educación, cultura y deportes; sanidad, seguridad social y consumo; impuestos, trabajo y comercio; transportes y comunicaciones; turismo y tiempo libre; servicios sociales; vivienda, urbanismo y ecología; instituciones y entidades y actualidad informativa.

Los representantes de la Compañía Telefónica y los directivos de la Comunidad de Castilla-La Mancha han destacado que en esta ocasión la telemática deja de ser exclusivamente de uso de las grandes empresas para situarse en puntos de acceso colectivo (municipios, centros de enseñanza, asociaciones de ganaderos... ).