La flota de Huelva vuelve a puerto sin consultar con los armadores

"Todos los barcos de Huelva y provincia vamos navegando para Huelva por motivo de apresamientos y estar indocumentados. Firmado, la flota". Así dice textualmente el contenido del telegrama, recibido en la sede de la Asociacíón Provincial de Arrnadores, de esta capital, y que refleja el deseo de las tripulaciones que faerían en caladeros marroquíes de regresar a sus puertos de origen. La medida fue tomada en alta mar sin consultar a los armadores.Para el presidente de la Asociacion Provincial de Armadores, Salvador Ivars, "tal actitud ha causado además un hondo malestar a nivel empresarial, ya que el amarre de la flota ocasionaría muchos millones en pérdidas económicas". Según él, todos los armadores onobenses están ordenando a los patrones de los pesqueros que se dirijan de nuevo hacia los caladeros de Marruecos, por cuanto la Administración pesquera española ha asegurado que las autoridades de aquel país van a respetar el acuerdo verbal de no realizar nuevos apresamientos de embarcaciones durante el período de negociaciones.

La junta directiva de la Asociación Provincial de Arrnadores de Buques de Pesca Fresca de Huelva ha expresado ya la aceptación de las líneas básicas del convenio con Marruecos, aunque no por considerarlo bueno, sino porque es lo único que se les ofrece, y el sector no resistiría una nueva paralización de la flota como sucede con Portugal, según se puso de manifiesto en reciente reunión mantenida por aquélla.

Los caladeros marroquíes son de vital importancia para la supervivencia de la bota pesquera onubense. En ellos faena normalmente un total de 143 embarcaciones, procedentes de cinco puertos: Punta Umbría, Isla Cristina, Lepe, Ayamonte y Huelva. De ellos, 134 se dedican a la actividad de pesca fresca, y los nueve restantes son congeladores. El número global de tripulantes enrolados en las mismas supera la cifra de los 1.700. En opinión de los propios armadores, la mano de obra que se genera en tierra se encuentra en una proporción de ocho personas por cada tripulante.

Problemas con Portugal

Esta última fuente informó que los dos barcos de esta población apresados recientemente en caladeros de Portugal -Loyola Uriarte, del que es armador, y Río Ebro- han sido sancionados por las autoridades de este país con sendas multas de 500.000 y 250.000 pesetas, respectivamente. Ayer tarde, aún permanecían retenidos en el puerto de Faro.La detención del Loyola Uriarte vino precedida de un grave incidente, ya que las fuerzas marítimas portuguesas realizaron algunos disparos, sin previo aviso, para intimidar a la tripulación del barco, según ha puesto de manifiesto el armador del mismo. En su opinión, la embarcación se hallaba sin faenar en el momento del apresamiento, y el marisco que llevaba a bordo había sido capturado en aguas españolas, por lo que considera totalmente injusta a acción de las autoridades portuguesas.