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Poetas de tres continentes buscan en Portugal los vínculos que les unen

Manuel Rivas

Doscientos poetas de tres continentes se han reunido el fin de semana en Afife (Portugal) en un encuentro que acabó ayer y con el que han querido llevar a la sensibilidad de los gobiernos el interés por la creación poética y en el que han buscado los vínculos que les unen.Pedro Homen de Melo, 79 años, poeta popularizado por los fados de Amalia Rodríguez, pasea lentamente bajo la cuatro veces centenaria magnolia del monasterio de Cabanas, en Afife (Portugal), y murmura con la solemnidad de los legendarios: "Ahora todos mis poemas vuelven aquí, junto a las flores de nieve". Muy cerca, en los salones de la casa del anciano hidalgo, poetas de tres continentes y distintas generaciones dialogaban a la búsqueda ,de un mayor intercambio. Unos 200 poetas, voces múltiples llegadas de Brasil, Venezuela, Guinea-Bissau, Santo Tomé y Príncipe, Cabo Verde, Galicia y las distintas regiones portuguesas, convocados por históricos vínculos pero sobre todo por la fuerza imperecedera de la voluntad creativa.

Situado en la Costa Verde portuguesa, Afife no es tierra de marineros, sino de emigrantes. Y de buenos albañiles. Artistas populares que un día hace ahora 100 años tomaron la iniciativa de construir el casino que ha servido de punto de referencia durante tres jornadas a este encuentro poético que, más allá de los debates academicistas, ha tenido un sentido espontáneo y festivo.

"Palaciega primero, conventual luego y pequeño burguésa después, nuestra cultura aún no ha conectado con el pulso social, a pesar del 25 de abril", explicaba óscar López, importante historiador actual de la 5teratura portuguesa.

Pero la palabra poética ha salido, por una vez, de los manuales y del ámbito decadentista para subir, entre fuegos de artificio, esculturas de aire y música saudosa o rockera, según las horas, al hemiciclo natural del monte Santo Antonio, donde más de 3.000 almas, viejos yjóvenes, turistas y nativos, blancos y pretos, le han dado un voto renovado de confianza.

"Seré todo lo que sueñe; / poeta castrado, no", gritaba entre aplausos el portugués Ary Santos, robando vitalidad a los años. "Bon día", dijo como mejor saludo y bajo la noche cerrada Carlos Espirito Santo, etnólogo y poeta, llegado desde Santo Tomé, donde "tenemos 15 poetas, 4 novelistas y ningún dramaturgo, pero un pueblo lleno de voluntad credora". Como desmintiendo que búsqueda vanguardista y aceptación popular estén condenadas a un divorcio permanente, aplausos entusiastas premiaron la actuación del colectivo poético gallego Rompente, cuyos jóvenes componentes agradecieron la acogida con un efusivo "Viva a nación sioux galega".

A pesar de notables ausencias -como la de los portugueses Eugenio de Andrade y Elder o la de los gallegos Novoneira, López Casanova o Manuel María- y la totalidad de poetas de las nacionalidades y regiones de España a excepción de Galicia, a pesar de los fallos de una organización desbordada por el número inesperado de asistentes.

"Era la primera vez que organizábamos algo de estas características", señalaba a EL PAIS Julio Cardoso, presidente del FITEI, orgianismo promotor, "y su aceptación es un reflejo del creciente interés en Portugal para potenciar el intercambio cultural entre los países de expresión ibérica".

Este balance era ratificado por X. L. Méndez Ferrín, quien significó el importante papel que puede jugar Gralicia como puente en esta nueva dimensión del entendimiento cultural. "Se está empezando a vencer la inercia y la comodidad mental que nos mantenía ignorantes y distantes a pesar de la proximidad; hasta hace pocos años, los únicos contactos llamados culturales consistían en suculentas papatorias de franquistas y salaz aristas".

Las conclusiones llamando a potenciar la infraestructura cultural -bibliotecas, apoyo a pequeños y medianos editores, renovación de programas en la enseñanza, etcétera- y a reforzar el intercambio entre los pueblos, serán elevadas a los respectivos gobiernos.

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