El ministerio prepara un plan de rescate de 'cerebros' investigadores y docentes españoles en el extranjero

El Ministerio de Educación y Ciencia prepara un plan de rescate de los llamados cerebros, docentes e investigadores españoles, que se encuentran en el exterior. La Ley de Reforma Universitaria (LRU), es el primer paso que permite la vuelta de algunos de ellos, así como las becas de reincorporación.

Los investigadores y docentes que actualmente se encuentran trabajando fuera de España pueden clasificarse en dos tipos según fuentes del Gabinete de la Secretaría de Estado de Universidades e Investigación. El primer grupo comprende a los investigadores con una experiencia mínima de dos o tres años en el extranjero y con tesis hechas en España, con becas y contratos acabados o renovados.La situación de estas personas, con edades medias de 30-32 años, es en general bastante inestable, pese a encontrarse en su mejor momento profesional y serían los más fácilmente recuperables. La LRU, mediante la disposición transitoria 9, les permite presentarse a las pruebas de idoneidad para acceder a la categoría de Profesor Titular de Universidad. Este colectivo es de unas 150 personas, principalmente de Estados Unidos, Alemania, Inglaterra y Francia. Por especialidades, los más númerosos son los risicos, químicos, biólogos y médicos

Anteriormente a la LRU, se hicieron algunos intentos de atraer a estos profesionales mediante las denominadas becas de reincorporación. Las becas se otorgaron en los años 80, 81, 82 y 83 y permitieron el regreso de un pequeño número sin garantizarles la continuidad, ya que no pudieron concursar a las plazas de interinos al haber sido convocatorias cerradas. En el presente año se han aumentado el número de becas de 18 a 32, y se piensa mantenerlas durante algún año más para permitir subsistir a este grupo, mientras se presentan a las pruebas de idoneidad.

El segundo grupo de cerebros en el exterior, está formado por los docentes e investigadores, que llevan más de diez años en el extranjero, con una posición académica y social estable. La recuperación de este colectivo es la más difícil y laboriosa ya que habría que ofrecerles en España una categoría académica y una infraestructura de investigación semejante a la que tienen en sus actuales países de residencia. En el Ministerio de Educación y Ciencia, se ha constituido un grupo de trabajo específico, encargado de elaborar un censo de este colectivo. Se desconoce por el momento el número de científicos susceptibles de estar interasados en volver a España aunque se confía en tener acabado el censo dentro de unos dos meses. La primera vía que facilita el regreso de estos investigadores ha quedado abierta mediante el artículo 38 de la LRU, que permite al Consejo de Universidades eximir a doctores, en atención a sus méritos, de los requisitos de ser catedrático o profesor titular de universidad con antiguedad de tres años, para concursar a plazas de catedráticos.

El ministerio realizaría funciones de mediación entre las universidades y el CSIC, y los científicos interesados en volver.